
Pagar con tarjeta de débito o crédito no es un acto poco frecuente, de hecho es una práctica cada vez más extendida, en un panorama donde tener efectivo en la billetera se vuelve cada vez una rareza. Esto aplica al momento de costear nuestra cuenta en un restaurante, y nos olvidamos de un detalle fundamental.
Un simple olvido podría estar contándonos mucho dinero, según indicó el Banco de España. Para la entidad financiera, es un grave error no revisar el importe a pagar y confiar plenamente en quien está realizando la transacción. Muchas veces nos apoyamos en la "buena fe del comercio" y no revisamos el importe a pagar que figura en la pantalla del TPV (terminal Punto de Venta).
Además, la entidad recomienda siempre aceptar una copia del ticket de transacción, incluso si este papel pueda ser un poco incómodo en nuestra billetera. Este recibo "ayuda a llevar un control adecuado de los gastos", indicaron.Aunque el banco pueda notificar la compra por correo o mensaje, si no se revisa el importe en el momento, "ya será demasiado tarde" para corregir un posible error.
Otros errores al pagar con tarjeta
Pero la falta de chequeo en la transacción no son las únicas ocasiones en las que cometemos errores y vulneramos nuestras finanzas. El Banco de España señaló las muchas otras ocasiones en que podemos equivocarnos al pagar con tarjeta.
- No leer los estados de cuenta: Esto puede hacer que se pasen por alto cargos no autorizados, cuotas o intereses. Es fundamental revisarlos para detectar a tiempo errores o transacciones fraudulentas.
- Usar solo el crédito y no pagar a tiempo: Esto puede llevar a una rápida acumulación de intereses, generando deudas crecientes, cargos por pagos atrasados y afectando la calificación crediticia.
- No entender las comisiones de la tarjeta: Las tarjetas pueden tener comisiones por pagos tardíos, compras fuera de la red de cajeros o uso en el extranjero. Desconocerlas puede ocasionar gastos inesperados.
- Exceder el límite de crédito: Superar el límite puede resultar en sanciones adicionales, como cargos por exceder el límite, o incluso la suspensión de la tarjeta.
- Hacer pagos mínimos en tarjetas de crédito: Esta práctica, aunque parezca conveniente, solo paga una pequeña parte del saldo y los intereses acumulados pueden convertir una deuda manejable en una carga financiera a largo plazo.
- No asegurar las transacciones en línea: Es crucial asegurarse de que el sitio web sea seguro al hacer compras en línea para evitar fraudes o robo de información.