La Dirección General de Estadísticas y Censo de la provincia de Salta presentó los resultados del informe “Mercado de Trabajo – Cuarto Trimestre 2024”, elaborado a partir del procesamiento de microdatos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Mientras la tasa de actividad apenas supera el 46%, la proporción de personas con empleo cayó interanualmente, ubicándose por debajo del promedio regional y nacional.

A esto se suma un aumento sostenido del desempleo y una brecha de género que se ensancha en todos los indicadores: las mujeres tienen menos participación, menos empleo y más dificultades para insertarse o mantenerse activamente en el mercado laboral.

Menos de la mitad de la población activa

El informe distingue en primer lugar la tasa de actividad que mide la proporción de la población económicamente activa, es decir, de personas que tienen ocupación o están buscando activamente trabajo, con respecto a la población total en una determinada región. 

En el Aglomerado Urbano de Salta, esta tasa alcanzó el 46,9% en el cuarto trimestre de 2024, representa un aumento del 1,0% en comparación con el trimestre anterior, y una variación negativa del 1,5% con respecto al cuarto trimestre de 2023. 

En el NOA la tasa de actividad fue del 46,6%, levemente menor que la tasa del Aglomerado Urbano Salta. A nivel general, que incluye el total de los 31 aglomerados urbanos, la tasa de actividad se ubicó en el 48,8%, mayor que la tasa de Salta. 


Menos trabajo para las mujeres

Más allá del número general, el informe advierte sobre la brecha de género que se acrecienta en la participación laboral. Las mujeres siguen estando en clara desventaja frente a los varones a la hora de insertarse o mantenerse en el mundo del trabajo.

Mientras que el 52,6% de los varones forman parte activa del mercado de trabajo, solo el 41,6% de las mujeres lo hace. Esa diferencia de 11 puntos porcentuales se ensanchó respecto al trimestre anterior y exhibe una barrera estructural para la inserción laboral femenina.

Cuando se observa el desglose por edades, la desigualdad se vuelve más pronunciada. En el grupo de 14 a 29 años, los hombres presentan una tasa de actividad del 50,7%, frente al 34,9% en mujeres, la brecha de género alcanza una diferencia de 15,8 puntos.

De la misma manera, en el grupo de 30 a 64 años la brecha es de 15,6%, lo que sugiere que la diferencia en la tasa de actividad entre hombres y mujeres es más pronunciada en este rango de edades, siendo de 90,7% para el primer grupo y de 75,1% para las mujeres.

El informe muestra que en todas las categorías hubo caídas respecto al cuarto trimestre de 2023. Pero no todas las bajas fueron iguales. 

La caída más fuerte fue en el grupo de las mujeres jóvenes, de entre 14 y 29 años, cuya participación se desplomó 8,4 puntos porcentuales. Es decir, hoy son muchas menos las que trabajan o buscan trabajo activamente en comparación con 2023.

También disminuyó la presencia de las mujeres adultas (30 a 64 años) en el mundo laboral, con una caída del 0,9%, al igual que los varones en general, que bajaron 0,7 puntos.


Un dato llamativo del informe señala a los varones jefes de hogar, que también salieron del radar laboral en un número significativo: -3,4% interanual, en un sector históricamente más estable.

La mayor tasa de actividad se registró de esta manera, en la población masculina con edades entre 30 y 64 años, la cual fue del 90,7% para el cuarto trimestre del año.

Empleo en baja y retroceso frente a 2023

Durante los últimos meses de 2024, el Aglomerado Urbano de Salta registró una tasa de empleo del 43,8%, lo que indica que menos de la mitad de la población tenía trabajo al momento del relevamiento. Si bien esto representa un leve incremento respecto al trimestre anterior (+0,3%), los datos son menos alentadores al mirar un año atrás: la caída interanual fue del 2,3%.

En términos regionales, Salta volvió a quedar por debajo del promedio. En el NOA, la tasa fue 44,3% y en el conjunto de los 31 aglomerados urbanos del país alcanzó el 45,7%.


La tasa de empleo específica, que se refiere a la proporción de personas con al menos una ocupación en relación a la población mayor de 14 años, fue del 55,5% y registró una variación negativa del 3,3% con el mismo periodo del año 2023. 

Menos acceso al empleo para ellas 

La brecha de género en la tasa de empleo alcanzó el 12,0%, lo que indica que la tasa de empleo es más alta en los hombres (50,0%) que en las mujeres (38,0%).

El detalle por categorías refuerza esta imagen: entre jefes y jefas de hogar, la diferencia llega al 17,5%. Mientras que entre los jóvenes, 16,2 puntos más de varones que de mujeres acceden al empleo. Y en el grupo de 30 a 64 años, se marca la mayor distancia: 18,1 puntos porcentuales.

El panorama empeora al revisar la evolución interanual: la única categoría que creció fue la de varones adultos (+0,3%). Todos los demás grupos registraron caídas, siendo el más afectado el de las mujeres jóvenes, con una baja de 10,2 puntos. También se retrajo el empleo entre las mujeres jefas de hogar (-4,4%) y entre las mujeres en general (-3,9%).


El desempleo crece y afecta más a las mujeres

En el último trimestre de 2024 la tasa de desocupación trepó al 6,7% en el Aglomerado Urbano de Salta, ubicándose por encima del promedio nacional (6,4%) y también del regional (5,0%). Eso significa que hay más personas buscando trabajo activamente, pero sin poder encontrarlo, en comparación con buena parte del país.

Además, el desempleo aumentó tanto respecto al trimestre anterior (+1,5%) como frente al mismo periodo de 2023 (+1,8%), marcando una tendencia sostenida de deterioro.

Pero como en casi todos los indicadores del informe, la desigualdad de género vuelve a hacerse notar. Las mujeres muestran una tasa de desocupación 3,6 puntos más alta que los hombres. 


La brecha se amplía al mirar los datos según edad. En el grupo de 14 a 29 años, el desempleo alcanza al 16,9% de las mujeres jóvenes, frente al 10,9% de los varones. En la franja de 30 a 64 años, la diferencia persiste: 6,7% en mujeres, contra 2,8% en varones. Mientras que entre las jefas de hogar, la tasa fue del 5,3%, muy por encima del 1,8% de los jefes varones.

El patrón que se repite es que las mujeres, sobre todo las más jóvenes, enfrentan más obstáculos para conseguir empleo en la provincia. 


Predominan los asalariados y crece el trabajo independiente

El mercado laboral de Salta sigue teniendo un perfil mayoritariamente asalariado: dos de cada tres personas ocupadas (66,5%) trabajan en relación de dependencia, según los datos del cuarto trimestre de 2024. Son empleos donde el trabajador aporta su tiempo y habilidades, pero las condiciones —horarios, herramientas, organización— vienen definidas por un empleador.


Sin embargo, también crece el universo de quienes trabajan por cuenta propia, sin jefes ni personal a cargo. Este grupo representa ya el 28,9% de los ocupados, consolidando una tendencia que, para muchos, combina autonomía con precariedad.

En números más pequeños, el 3,1% son “patrones”, es decir, personas que emplean al menos a una persona y gestionan su propio emprendimiento o empresa. Finalmente, un 1,6% trabaja en negocios familiares sin recibir remuneración directa.

El informe revela que creció un 31,8% la cantidad de mujeres en la categoría “Patrón”, es decir, mujeres que gestionan sus propios negocios y emplean al menos a una persona. También aumentaron un 10,3% las trabajadoras por cuenta propia, que emprenden sin personal a cargo.

Mientras tanto, el empleo asalariado femenino cayó con fuerza: hay un 15,2% menos de asalariadas que un año atrás, lo que sugiere que muchas mujeres debieron buscar alternativas fuera del trabajo formal en relación de dependencia. También descendió un 4,7% la cantidad de mujeres que colaboran sin remuneración en emprendimientos familiares.


La cantidad de asalariados hombres disminuyó un 7%. Creció la cantidad de hombres que se volcaron a formas más autónomas de trabajo. Los trabajadores por cuenta propia aumentaron un 17,3%, lo que puede reflejar tanto un impulso emprendedor como una salida ante la falta de empleo en relación de dependencia. También creció un 5,9% la cantidad de varones en la categoría “Patrón”, aquellos que conducen un emprendimiento y emplean personal.

Ramas de actividad y decrecimientos

Según el informe, el 72,5% del total de ocupados del Aglomerado Urbano Salta se agrupan en las ramas de actividad de “Comercio”, “Servicio Doméstico”, “Construcción”, “Industria manufacturera”, “Enseñanza”, “Hoteles y restaurantes” y “Administración Pública y Defensa”. 

Los ocupados por rama de actividad especificada, que presentaron un mayor crecimiento interanual pertenecían a “Agricultura, Ganadería, Caza, Silvicultura y Pesca” (56,0%), seguido por “Hoteles y restaurantes”, con un aumento del 37,7%.

En tanto, las ramas con un decrecimiento en su número de trabajadores interanualmente son “Actividades Inmobiliarias” (-46,2%) seguido por “Explotación de Minas y Canteras” (-45,4%)


Trabajo con género: ¿quiénes ocupan qué lugar?

La distribución por sexo revela también fuertes desigualdades sectoriales. Mientras que el 84,6% de los varones ocupados se concentra en esas principales ramas, el 91,2% de las mujeres también lo hace, pero en sectores distintos.


De esta manera, se observa que la Construcción está dominada casi por completo por hombres: el 96,6% de quienes trabajan allí son varones. En contraste, el 100% de quienes realizan trabajo doméstico y el 72,7% de quienes enseñan son mujeres.