
Rumbo económico en Argentina: ¿cómo cerrará la primera mitad de 2025?
Este mes será clave para acumular dólares, con el fin de cumplir la meta de reservas pactada con el Fondo, a la vez de reactivar el consumo con los ahorros no declarados. Otro de los objetivos oficiales es la desaceleración inflacionaria.

1- ¿Cuál es el escenario que se le avecina a la economía argentina?
Tres son los objetivos que la gestión del presidente Javier Milei se impuso para cerrar el primer semestre del año: acumular más dólares (por la vía de la liquidación de los agroexportadores y por impulso del uso de los ahorros no declarados), fortalecer las reservas internacionales del Banco Central para cumplir la meta pactada con el Fondo Monetario Internacional (el 13 de este mes está prevista la revisión de esa condicionalidad, aunque el jefe de Estado dice que está cumplida). y mantener a la Argentina en la senda de la desaceleración inflacionaria en un año caracterizado por las elecciones legislativas del 26 de octubre.
2- ¿Cómo se comportaron esas tres variables durante mayo último?
En mayo las reservas brutas internacionales del Banco Central cayeron U$S 2.106 millones. Al cierre del quinto mes del año, se ubicaron en U$S 36.854 millones, su nivel más bajo desde mediados de abril, cuando el FMI giró a la Argentina la primera remesa del Programa de Facilidades Extendidas. En el mercado no se descarta que el Gobierno vuelva a utilizar el mecanismo del Bono del Tesoro (Bonte), usado para tentar a inversores internacionales, para acercarse a la meta y/o acumular dólares con el fin de pagar los vencimientos en esa moneda de principios de julio (poco más de U$S 4.000 millones). Respecto de la inflación, hay consenso entre las consultoras privadas que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se movió en la zona del 2%. En cuanto a las liquidaciones de los agroexportadores, la Bolsa de Comercio de Rosario estima que los primeros seis meses del año cerrará en un monto cercano a los U$S 18.200 millones, un 26% por encima de los primeros seis meses de 2024.
3- ¿Qué sucedió con la economía a lo largo de estos cinco meses?
Según el economista Eduardo Robinson, la primera parte del año se puede dividir en dos etapas: antes y después del acuerdo con el FMI. En efecto, desde enero hasta mediados de abril, la economía se enfrentaba con una alta dosis de incertidumbre acerca de cuál sería el régimen cambiario que se establecería en el acuerdo. Eso trajo cierta presión al dólar y volatilidad en el mercado cambiario. El objetivo del acuerdo que empezó a regir a mediados de abril buscó reforzar las desnutridas reservas del Banco Central y despejar expectativas devaluatorias. El sistema de “crawling peg” implementado por el gobierno tras la fuerte devaluación de diciembre de 2023 empezó a mostrar su debilidad cundo el marzo pasado la inflación alcanzó el 3,7% y el dólar subía al 1% mensual, explica el consultor. Luego sobrevino la flotación cambiaria entre bandas, con un precio de $ 1.400 en la banda superior y de $ 1.000 por dólar en la inferior.
4- ¿Qué sucedió con la flotación cambiaria?
El tipo de cambio se ubicó en el medio, produciendo un salto en el dólar que activó las expectativas de un incremento en la devaluación y el inminente traslado a precios, recordó Robinson. Pero, este efecto se diluyó en pocos días, cuando los supermercados rechazaron las listas de precios con incrementos y la cotización del dólar empezó a ir hacia el piso de la banda cambiaria, acota en una charla con LA GACETA. Mientras tanto, empezaron a encenderse luces amarillas cuando el mercado advierte que el Banco Central no acumula reservas internacionales en los meses de mayor entrada de dólares comerciales por liquidación de la cosecha gruesa y siendo que el acuerdo con el FMI estable la acumulación de reservas. El presidente Javier Milei sostiene que el Banco Central no comprará dólares en la medida que el tipo de cambio no traspase el piso de la banda de flotación. Por lo tanto, la anemia de reservas internacionales continúa.
5- ¿Cómo surge la idea de lanzar el plan de uso de ahorros no formalizados?
A inicios de mayo, consciente de que la actividad económica aunque ha mostrado una leve recuperación en comparación con el año anterior, aún enfrenta signos de fragilidad, el Gobierno decide implementar medidas para estimular la formalización de los dólares que permanecen en el circuito informal. Con este propósito, se han diseñado incentivos fiscales y cambios regulatorios que buscan captar estos fondos que, de ser integrados al sistema formal, podrían fortalecer las reservas internacionales y dinamizar sectores clave de la economía. Sin embargo, advierte Robinson, esta estrategia no está exenta de desafíos, pues la confianza en las políticas económicas sigue siendo un factor crucial para su éxito, por lo que la foto macroeconómica muestra cierta desaceleración en la tasa de inflación, pese a que siguen los incrementos en servicios privados, como prepagas, colegios, alquileres, expensas, entre los más relevantes.
6- ¿Cómo se presenta el escenario hacia el resto del año?
El gobierno enfrenta su primer test electoral, y para ello, debe sostener la recuperación económica, desacelerar más aún la inflación y el fortalecimiento del poder adquisitivo de la población, señala el economista. Los sectores industriales, en particular, han comenzado a presionar por mayores incentivos que les permitan sostener la producción y garantizar la generación de empleo, en un contexto donde los costos energéticos y logísticos siguen siendo un desafío.
Paralelamente, y no es un tema menor, el contexto internacional tampoco fue benigno durante la primera parte del año como consecuencia de la agresiva política arancelaria impulsada por la administración de Donald Trump en Estados Unidos. Esto hizo que los precios hayan mostrado una marcada inestabilidad. Este comportamiento es impulsado, en parte, por las expectativas de una probable recesión en la principal economía del mundo, Estados Unidos, donde los indicadores de crecimiento y consumo no son muy alentadores, puntualiza Robinson. Para la economía argentina, que depende de exportaciones agrícolas y materias primas, las fluctuaciones de precios son un desafío. Este inicio de año ofrece cierta tranquilidad sobre la inflación, pero genera dudas sobre la sostenibilidad de la política cambiaria y el éxito del plan colchón para reactivar la economía, finaliza el consultor.
7- ¿Cómo se comportó el dólar?
Tras la emisión del Bonte 2030 por U$S 1.000 millones, tanto el dólar spot como los futuros extendieron las subas exhibidas durante la semana que pasó. Cabe recordar que, dado que el “rollover” de la licitación fue de 100% de los vencimientos (no hubo un incremento del stock de deuda), desde la perspectiva del esquema cambiario y monetario, la colocación del Bonte fue una forma de adquirir divisas dentro de la banda, observa Portfolio Personal Inversiones (PPI). El tipo de cambio se alejó del piso de la banda y esta cada vez más cerca del punto medio de $ 1.203. En sintonía con el spot, la curva de futuros de dólar cerró con alzas de entre 1,8% y 2,4%, exhibiendo las mayores subas en el tramo largo. No hay que perder de vista que en abril, mes en el que se levantó el cepo cambiario, los ahorristas compraron U$S 2.048 millones y efectuaron ventas por U$S 111 millones, y, en cuanto a la cantidad, 1 millón de individuos adquirieron billetes, mientras que unos 309.000 vendieron.
8- ¿Cuál será la dinámica de la oferta y demanda en el mercado oficial de cambios?
Según PPI, por el lado de la oferta, tanto los flujos de la economía real como los financieros continúan traccionando con buen ritmo. Así, la liquidación del agro aceleró notoriamente tras la ratificación de que las retenciones para la cosecha gruesa volverán a subir a partir del 1 de julio. Además, los préstamos en dólares, excluyendo tarjetas de crédito, continúan siendo una oferta extra de divisas en el mercado oficial, ya que las restricciones para empresas siguen en pie (están obligados a liquidar en Mercado Libre de Cambios). Si bien el BCRA no intervendría el spot dentro de la banda, Portfolio Personal Inversiones no descarta que sí lo haga en la curva de futuros para contener al dólar y, así, incentivar los flujos financieros (financiaciones locales, inversión de portafolio de no residentes y emisión de Obligaciones Negociables MEP y cable). Por el lado de la demanda, las necesidades de las provincias para atender compromisos de deuda en divisa externa pudo haber presionado al tipo de cambio. Más allá de eso, PPI considera que a este nivel de tipo de cambio hay una demanda del retail e importadores que evita que el dólar siga comprimiendo. A modo ilustrativo, la divisa estadounidense no pudo perforar el umbral de $ 1.110 durante mayo.
Estabilización presente y las presiones que se vienen
Según el economista Federico Vacalebre, el acuerdo con el FMI contribuyó a que en la Argentina haya mayor estabilidad cambiaria y a generar más competencia con las tasas en dólares, lo que se puede interpretar como una reactivación más profunda de la economía. “Este escenario puede consolidarse si se confirma que la inflación de mayo se ubica en torno de un 2%. De esta manera, podemos apreciar que el primer semestre del año cerrará con una estabilización más sólida de los fundamentals, algo que esta gestión viene trabajando desde que arrancó en diciembre de 2023”, dice a LA GACETA el profesor de la Universidad del CEMA. De darse ese pronóstico, Vacalebre sostiene que la primera mitad del año terminará sin grandes contratiempos para el dólar, ayudado por el efecto estacional de la inyección de divisas por parte del FMI y por la liquidación de los agroexportadores. Paralelamente, está pendiente el resultado del Plan de Reparación Histórica del Ahorro de los Argentinos, que puede contribuir al ingreso de fondos al mercado formal. Sin embargo, plantea el economista, durante el segundo semestre del año habrá una mayor presión sobre el tipo de cambio porque el Banco Central tendrá que pagar más importaciones y otras deudas comerciales. “Por ahora, hay que aprovechar la dinámica de beneficios que se plantea y acumular tantos dólares como sea posible para sostener la estabilidad de la economía”, subraya.