La sigilosa negociación que activó un aliado de Milei para ampliar la Corte y retomar los nombramientos

La derrota que sufrió el gobierno de Javier Milei al intentar nombrar dos nuevos jueces en la Corte Suprema el mes pasado no canceló el tema sino que lo demoró a la espera de que se active una nueva negociación, donde un experimentado senador aliado de la Casa Rosada ya trabaja para acercar posiciones entre La Libertad Avanza y el peronismo/kirchnerismo.

Se trata del salteño Juan Carlos Romero, un histórico de la Cámara alta de orígen peronista pero enfrentado desde siempre al kirchnerismo y, actualmente, aliado del Gobierno. Días atrás presentó un proyecto que propone ampliar la Corte Suprema de 5 a 7 miembros y con ello empujó un debate que se inició este miércoles en un plenario de comisiones.

Romero aseguró que no recibió ningún pedido del Gobierno sobre el tema y en la Casa Rosada ratifican que ellos no tienen nada que ver y que están al margen, a pesar de haber recibido un duro golpe cuando el Senado rechazó en abril los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, los nominados de Milei para completar la Corte. El salteño había votado a favor de ambos, en línea con el oficialismo.

Sin embargo, en varios despachos del Senado deslizaron a iProfesional que ven a Romero como un "delegado informal" del Gobierno para reactivar el debate y encauzar una negociación a la que el oficialismo está obligado, porque se necesita una mayoría de dos tercios para nombrar jueces en la Corte Suprema y sin votos del peronismo no llegan a ese número.

Con su experiencia, sus amplios contactos y su independencia de todos los partidos políticos nacionales, el histórico senador salteño sería idóneo para ser algo así como "el árbitro" de una negociación que, según indicaron fuentes parlamentarias a iProfesional, ya está en marcha, aunque duraría algunos meses y se maneja con sigilo.

¿Cómo es la negociación que activó un aliado de Javier Milei para ampliar la Corte Suprema?

El proyecto de Romero para ampliar la Corte no es el único, de hecho ha ocho en total, de los cuales uno es de Unión por la Patria. El del salteño se destaca por la curiosidad ser él un aliado del Gobierno y, sobre todo, haberlo presentado al día siguiente de la sorpresiva caída de la ley Ficha Limpia, que le hubiese impedido a Cristina Kirchner competir en eleccions nacionales, por el rechazo de dos senadores misioneros, también aliados del oficialismo.

Romero viene conversando hace tiempo sobre este tema -incluso desde antes de presentar el proyecto- con el jefe del bloque Unión por la Patria, José Mayans, uno de los alfiles de Cristina Kirchner en el Senado y en el PJ, según confirmaron a iProfesional fuentes de ese espacio.

"No hay todavía un diálogo con el bloque de La Libertad Avanza, pero a Romero lo ven como alguien que representa los intereses del Gobierno en esa negociación", indicó a este medio un operador parlamentario al tanto de las conversaciones. En la bancada peronista señalan que no les desagrada la ampliación del máximo tribunal a 7 jueces.

Es el número que propone el proyecto de Romero. La iniciativa establece además que "no más de cinco de sus integrantes serán del mismo sexo". Es decir que al menos debe haber dos mujeres. Este punto contempla a su vez el planteo que le hicieron llegar tanto el peronismo como el PRO, la UCR y otros bloques al Gobierno cuando Milei impulsó los pliegos de Lijo y García Mansilla, que habrían dejado a la Corte solo con hombres.

En otro despacho donde están al tanto de las conversaciones que mantienen Romero y Mayans deslizaron a iProfesional que hay un tercer actor con el que hablan sobre el tema: el ex jefe de los senadores peronistas y actual diputado Miguel Pichetto, otro conocedor profundo de las negociaciones parlamentarias y de la idea de ampliar la Corte Suprema, que no es nueva pero adquirió un nuevo valor en la "era Milei".

El Gobierno y su postura sobre la ampliación de la Corte: ¿por qué podría serle útil? 

El fracaso del Presidente y de su asesor estrella, Santiago Caputo, en su intento por completar la Corte Suprema dejó expuesto un problema que atañe también a otros cargos judiciales como el del procurador General, que tiene ocupante interino desde 2017: sin un acuerdo es imposible alcanzar la mayoría necesaria, mucho menos con un Gobierno en franca minoría como el actual.

Para llegar a los dos tercios varios bloques deben llegar a un entendimiento, pero principalmente dos: el que más votos ostenta, como es hoy Unión por la Patria, y el oficialismo por una sencilla razón: los jueces para la Corte deben ser propuestos al Senado por el Presidente de la Nación.

En ese sentido, un ampliación de la Corte facilitaría el acuerdo porque Gobierno y oposición pueden proponer los nombres que luego el jefe de Estado enviaría como pliegos para su tratamiento. Sería, ni más ni menos, una forma de completar el máximo tribunal y que Milei pueda finalmente designar a sus propios jueces sin sufrir una derrota como la de abril pasado.

Las dudas en torno al rol del Gobierno, en cualquier caso, se develarían próximamente, dado que las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia que ya empezaron a tratar el tema convocarán a "funcionarios del Poder Ejecutivo" para que den su opinión sobre la ampliación de la Corte, según adelantó la presidenta de la comisión de Justicia, Alejandra Vigo, en diálogo con iProfesional y la prensa acreditada en el Senado. 

Guiños de los senadores, en una negociación que recién empieza 

Si bien Romero y voceros oficiosos del Gobierno aseguran que no están jugando en tándem, el proyecto del salteño puso activó el debate en las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia, a diferencia de otras iniciativas. Además, la primera está presidida por el libertario Juan Carlos Pagotto, hombre muy cercano a Eduardo "Lule" Menem, mano derecha de Karina Milei.

Esto es otro factor que genera suspicacias sobre el rol del senador salteño y cuánto tiene que ver la Casa Rosada en la nueva discusión sobre la Corte, ahora con la idea de la ampliación. También sobrevuela el asunto la interna en el "triángulo de hierro": la derrota anterior fue atribuida a Santiago Caputo mientras que ahora el debate en comisiones tiene entre sus conductores a un senador vinculado indirectamente a Karina Milei.

Durante la primera renión hubo algunos guiños por parte del oficialismo y del peronismo. Mayans indicó: "Me parece importante el aporte que hace el senador Romero. Tenemos que ponernos de acuerdo los partidos políticos". En tanto, Pagotto expresó: "Hay que escuchar todas las campanas y despojarnos de todas las cuestiones ideológicas (...) Entre todos podemos lograr un consenso".

No obstante, entre los senadores coinciden es que es muy difícil avanzar con un debate de este calibre en un año electoral. En el Gobierno, en tanto, la prioridad está puesta hoy en aprobar los proyectos que forman parte del plan "dólares del colchón" y para cualquier otra reforma prefieren esperar a después de las elecciones de octubre, cuando sumarían varias bancas más en el Senado.

De esta forma, en caso de haber un acuerdo se cristalizaría recién después de los comicios, aunque el gobierno de Javier Milei probablemente fije postura sobre la idea de ampliar la Corte Suprema antes de los comicios, en el plenario de comisiones del Senado. Mientras tanto, el proyecto de Romero abrió el debate y, sobre todo, activó una negociación todavía inmadura, pero algo más encaminada de lo que parece.