

Con la confirmación del resultado que ubicó al kirchnerismo como la segunda opción más votada de la elección porteña de medio término, el candidato de Es Ahora Buenos Aires, Leandro Santoro, aseguró que lo expresado en las urnas evidenció que el “PRO dejó de representar a los porteños”.
“Las urnas han hablado y han expresado una decisión que es inapelable. En la Ciudad de Bueno Aires se ha cerrado el ciclo del abandono, un ciclo político que permitió que demandas históricas de los porteños queden insatisfechas. El PRO dejó de representar a los porteños”, dijo desde su búnker. Con el 99% de las mesas escrutadas, Santoro se posicionó segundo con el 27,35% de los votos,
En esta línea, el dirigente de origen radical sostuvo que a su espacio político le tocó enfrentar a dos gobiernos en un contexto muy adverso, donde “está permitido cualquier cosa”. “Este resultado nos obliga a seguir trabajando. Una ciudad inclusiva, con sentido social y pujante. Es ahí donde vamos a poner el esfuerzo en la legislatura”, declaró.
Nueva realidad
Durante su intervención, Santoro evitó hacer un balance únicamente electoral y optó por ubicar el resultado en un contexto más amplio. Habló de una “nueva realidad” en la Ciudad de Buenos Aires y se comprometió a seguir construyendo una alternativa de gobierno: “Este resultado nos obliga a seguir trabajando para construir la ciudad que queremos. Si la crueldad se puso de moda, que no cuenten con nosotros. Que más temprano que tarde, la solidaridad pueda ser mayoría en la Ciudad de Buenos Aires”.
Además de renovar su banca en la Legislatura porteña, el espacio encabezado por Santoro logró sumar dos nuevas bancas y al menos seis comunas, lo que fue celebrado por su equipo como un avance en términos de representación territorial.
“Si la crueldad se puso de moda, no cuenten con nosotros. Entendemos los resultados de las urnas, pero entendemos los principios que nos llevaron a comprometernos políticamente. De ninguna manera vamos a aceptar que la crueldad se haya puesto de moda para siempre”, cerró.