La Justicia norteamericana bloqueó este viernes las deportaciones de migrantes. Tras la decisión judicial, el presidente estadounidense, Donald Trump, acusó a la Corte Suprema de impedirle cumplir sus "promesas electorales".
El fallo del Máximo Tribunal fue aprobado por una amplia mayoría de cortesanos, siete contra dos volvieron a prohibir las expulsiones de migrantes que Trump dispuso bajo la Ley de Enemigos Extranjeros del siglo XVIII. Incluso tres de los que asumieron durante el primer mandato del republicano votaron en contra de las deportaciones.
Desde que regresó al poder en enero, el magnate cuestionó muchos de los fallos judiciales que limitaron sus decretos presidenciales sobre distintos temas. Esta vez no fue la excepción, el mandatario expresó en su red social Truth: “La Corte Suprema de Estados Unidos no me permite hacer aquello para lo que me han elegido”.
La decisión de la Corte sorprendió Trump, sin embargo, anteriormente el Tribunal ya se había expedido sobre las expulsiones sumarias de inmigrantes venezolanos, extraditados a la prisión de San Salvador bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798. El fallo emitido el 19 de abril de este año había sido claro, no acompañaba la política presidencial.
Enfadado con el revés judicial, Tumor emitió todo tipo de improperios contra los jueces y los acusó de integrar la banda Tren de Aragua, declarada organización "terrorista" global por Washington. En tanto que felicitó a los que acompañaron sus deportaciones.
"¡Éste es un día malo y peligroso para Estados Unidos!", sostuvo Trump, a la vez que les agradeció a los dos jueces conservadores que votaron en contra del fallo, Clarence Thomas y Samuel Alito, por "intentar proteger" el país. Ambos asumieron durante los mandatos de los Bush. En cambio, Neil M. Gorsuch, Brett M. Kavanaugh, Amy C. Barrett, que ingresaron a la Corte durante el primer mandato de Trump, votaron la sentencia que rechaza su política.
Los fundamentos de la Corte Suprema norteamericana
Uno de los argumentos de la Corte norteamericana para rechazar las deportaciones de Trump es que no se les garantiza a las personas el tiempo suficiente para impugnar su expulsión.
Los jueces estimaron que "una notificación aproximadamente 24 horas antes de la expulsión, desprovista de información sobre cómo ejercer los derechos del debido proceso (...) no cumple los requisitos".
Al mismo tiempo, la Corte consideró que está demasiado "alejada de las circunstancias sobre el terreno", por lo que devolvió el caso al Quinto Circuito, un tribunal de apelaciones, para que determine si es lícito el uso de la Ley de Enemigos Extranjeros y para que establezca las condiciones en las que los migrantes pueden impugnar su expulsión ante los tribunales.
"Para ser claros, hoy únicamente decidimos que los detenidos tienen derecho a una notificación mayor que la dada el 18 de abril, y otorgamos una medida cautelar temporal", recalcaron los magistrados.
El Máximo tribunal se refirió a los “errores” cometidos, como con el salvadoreño Kilmar Ábrego García, enviado en marzo junto con los venezolanos a El Salvador, ante el que la administración afirmó que "no podía garantizar su regreso". Sobre ese tema, los jueces le pidieron a los tribunales inferiores que aborden el caso con urgencia porque, si bien reconocen "la importancia de los intereses de seguridad nacional del gobierno", al mismo tiempo sostienen la necesidad de que "se promuevan de conformidad con la Constitución".
Donald Trump también tuvo un revés en el Congreso
A la vez que la Corte rechazó la política migratoria, varios congresistas republicanos echaron abajo este viernes una votación clave para que Donald Trump avanzara con un megaproyecto de ley de ajuste fiscal y reducción de gasto público.
Trump presiona para que los congresistas aprueben cuanto antes este proyecto de ley que le permitiría cumplir algunas de sus promesas de campaña, como extender los créditos fiscales de su primer mandato (2017-2021) que expiran a finales de año o recortar la inversión en salud. Esto último, haría que millones de estadounidenses pobres pierdan su cobertura de salud.
Sin embargo, el Partido Republicano dividido en el Congreso complicó los proyectos de Trump. Esto levantó serias dudas sobre si superará una votación en la Cámara de Representantes la semana que viene.
A pesar de los llamdos de Trump en las redes sociales, cinco conservadores del Comité de presupuesto de la Cámara de Representantes, liderado por los republicanos, se unieron a los demócratas el viernes para rechazar el proyecto de ley.
LM