La torta invertida es una receta muy codiciada en el mundo de la pastelería. Asimismo, se denomina invertida porque la decoración se arma en la base del molde y, luego, al invertirla para desmoldarla queda en la parte superior, por eso es importante ser prolijos en esa etapa de la elaboración. Puede prepararse con cualquier fruta, sin embargo, en este caso, elegimos hacerla de duraznos para aprovechar la temporada pero si quieres hacerla en otro momento del año, simplemente reemplaza los duraznos frescos por los enlatados.

Ingredientes para preparar la torta invertida de durazno

Para el caramelo

  • 200 gramos de azúcar (1 taza)

Para la torta

  • 2 duraznos frescos
  • 2 tazas de harina leudante
  • 1 taza de azúcar (200 gramos)
  • 2 huevos
  • 1 taza de leche (240 mililitros)
  • 100 gramos de manteca
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • cantidad necesaria de manteca para untar molde

Cómo hacer Torta invertida de durazno

  1. Antes de iniciar la preparación de la torta haremos la base. Para ello, prepara el caramelo en el mismo molde de la torta. Vierte allí el azúcar y coloca sobre el fuego directo. Cuando el azúcar se haya fundido completamente, distribúyelo por toda la superficie del molde cubriendo bien la base y un par de centímetros de los laterales. Deja enfriar y, una vez que esto haya ocurrido, enmanteca mucho y muy bien todo el caramelo y el molde. Truco: también puedes preparar el caramelo en una olla y verterlo luego en el molde.
  2. Lava muy bien los duraznos y córtalos en rodajas de unos 2 cm, enciende el horno a 160 °C para para precalentar. Truco: en este caso no retiramos la piel de los duraznos porque eran suaves y sin pelusas. Pero si lo prefieres, puedes pelar la fruta.
  3. Cubre la base del molde con los gajos de duraznos, hazlo de manera prolija, ya que como te dijimos, esta parte quedará en la superficie de la torta al desmoldarla. Con el durazno que te haya quedado, puedes realizar un colchón sobre la capa inicial.
  4. Ahora comienza con la masa. Bate en un bol la manteca pomada (es decir blanda), junto con el azúcar y la esencia de vainilla.
  5. Cuando notes que el azúcar se ha disuelto, añade los huevos uno a uno batiendo muy bien entre cada uno.
  6. Incorpora la leche y la mitad de la harina tamizada. Bate un poco más y, cuando se haya integrado, añade el resto de la harina. Vuelve a batir solo lo necesario para que no queden grumos.
  7. Vuelca la masa en el molde sobre los duraznos y, si es necesario, empareja con espátula o el reverso de una cuchara. Luego, hornea durante 50 minutos en horno precalentado a 160 °C. Truco: recuerda hacer la prueba del palillo para estar seguro que la torta está hecha.
  8. Desmolda sobre el plato de presentación mientras la torta está caliente y listo, ya podrás disfrutar la tarta de durazno fácil y rápida.