16 Mayo 2025
MONTEVIDEO, Uruguay.- Mientras miles de personas se agolpaban a las afueras del Palacio Legislativo de Montevideo, en la segunda jornada del velatorio del ex presidente José ‘Pepe’ Mujica, muchas otras acompañaban con aplausos, cantos y mensajes para Mujica. También, entonaron junto a los artistas Eduardo Larbanois y Mario Carrero la canción ‘A Don José’.
La espera para llegar hasta los restos del ex presidente podía tardar hasta dos horas.
Una de las primeras en llegar a la mañana fue la viuda de Mujica y ex vicepresidenta de Uruguay, Lucía Topolansky, acompañada de Raquel Pannone, médica personal de “Pepe”.
Muchas de las personas que entraron al recinto lo hicieron con banderas uruguayas, del Movimiento de Participación Popular -sector creado por Mujica- y de la coalición Frente Amplio. Algunos lo hicieron en silencio, otros cantando “Pepe querido, el pueblo está contigo”.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, llegó al Palacio Legislativo de Montevideo tras culminar su gira por Japón y China para darle el “sentido pésame” a la familia del fallecido y al pueblo uruguayo. Al enterarse de la muerte de Mujica, Boric publicó en sus redes sociales: “Te vas físicamente pero te quedas para siempre. Te prometo que el olivo que plantamos en febrero en tu chacra florecerá. Gracias por la vida y las enseñanzas. Contigo será imposible el olvido”.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que viajó directamente desde China para acompañar el velatorio, le rindió un cálido y emocionado homenaje. “Pepe Mujica es un ser humano superior, es una persona que intentó cambiar el mundo con la singularidad, la competencia política, con la capacidad de hablar sobre todo con la juventud”, dijo Lula minutos después de fundirse en un abrazo con Topolansky, ante el ataúd del ex guerrillero.
Mujica murió el martes a los 89 años en su modesta finca en la periferia de Montevideo, acompañado por Topolansky. Le habían diagnosticado cáncer de esófago un año antes.
Lula y Boric fueron recibidos por el presidente Yamandú Orsi en las escalinatas del Parlamento y se sumaron al velatorio público de Mujica, junto a unas 100.000 personas a lo largo de dos días, según las primeras estimaciones oficiales.
Ambos presidentes estaban en Pekín en el Foro Ministerial China-Celac cuando recibieron la noticia de su muerte.
Acongojado, Lula señaló que voló más de 25 horas para rendir tributo a su amigo. Sin escatimar elogios a Mujica, el brasileño reconoció que sentía “mucha tristeza” por su muerte y por la del Papa Francisco, fallecido en abril a los 88 años.
El lugar de descanso
Los restos del ex militante tupamaro, quien pasó 13 años de su vida en prisión, serán cremados hoy. Su familia anunció que sus cenizas serán esparcidas en su chacra, un modesto terreno rural ubicado a las afueras de Montevideo, en donde Mujica vivía con Topolansky.
El ex mandatario expresó en reiteradas ocasiones la voluntad de reposar junto a su perra Manuela, enterrada en las inmediaciones de la propiedad, y quien fue descrita por Mujica como “la integrante más fiel” de su gobierno. “El día que yo me muera he pedido que me incineren y que las cenizas las pongan ahí, abajo de ese árbol, junto a Manuela”, declaró el líder político en una entrevista al diario “Página/12” de Argentina.
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