La tensión entre el PRO y La Libertad Avanza volvió a escalar, luego de que el presidente Javier Milei respondiera con dureza a Mauricio Macri por su reciente frase sobre los dirigentes “que tenían precio”. El cruce verbal expone con crudeza las internas que amenazan con frustrar un acuerdo electoral entre ambos espacios de cara a las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires.
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La tensión entre el PRO y La Libertad Avanza volvió a escalar, luego de que el presidente Javier Milei respondiera con dureza a Mauricio Macri por su reciente frase sobre los dirigentes “que tenían precio”. El cruce verbal expone con crudeza las internas que amenazan con frustrar un acuerdo electoral entre ambos espacios de cara a las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires.
Durante una entrevista televisiva en la que irrumpió sorpresivamente en el set, Milei fue consultado por la frase del exmandatario en Mar del Plata: “Los dirigentes que tenían precio ya fueron comprados. Los que quedamos tenemos valores”, en alusión directa al pase de varios referentes del PRO a las filas libertarias.
Fiel a su estilo, el Presidente no se guardó nada: “Entonces que traiga la factura y la muestre, ¿qué querés que te diga?”, lanzó Milei, dejando en claro que no está dispuesto a dejar pasar el comentario de Macri sin responder.
Lejos de bajar el tono, Milei también opinó sobre el futuro de una posible alianza entre ambos espacios en territorio bonaerense. “Puede ser que un grupo minúsculo del PRO no quiera el acuerdo, pero para la Provincia marcha muy fuerte”, aseguró, y agregó: “No tengo ninguna duda de que entre Espert, Cristian Ritondo y Diego Santilli pueden armar una estructura súper competitiva para arrebatarle la provincia de Buenos Aires al soviético, comunista y bolchevique”, en referencia al gobernador Axel Kicillof.
La frase de Macri, que claramente dejó heridos en su propio partido y generó reacciones en cadena, encuentra ahora una réplica filosa del jefe de Estado, que aprovecha la interna amarilla para marcar terreno.
Mientras tanto, la posibilidad de un armado conjunto entre el PRO y LLA en la provincia más poblada del país se diluye entre pases de factura, declaraciones explosivas y egos desbordados.
