
Lionel Messi volvió a ser el eje del espectáculo, pero esta vez en un escenario donde el desequilibrio no pasó por su botín izquierdo sino por la solidez colectiva de un Inter Miami que aprendió a sufrir, pero se terminó quedando con un triunfo tan agónico como necesitado.
En su partido número 50 con la camiseta rosa, “Pulga” no marcó, pero fue protagonista con destellos de su jerarquía, como esa jugada en la primera mitad donde amagó a dos rivales y sacó un remate venenoso que se fue besando el palo. Fue un partido distinto para él y para el equipo: sin lujos, sin goleadas, pero con un triunfo trabajado que lo dejó en el segundo puesto de la Conferencia Este de la MLS.
En Cleveland, ante un marco impactante de más de 60 mil personas, Inter se impuso por 1-0 a Columbus Crew con un tanto completamente argentino: centro del ex Boca Marcelo Weigandt y definición de hombro de Benjamín Cremaschi. Messi, más involucrado en la construcción que en la definición, se mostró activo en el primer tiempo, combinando bien con Luis Suárez y abriendo espacios para Tadeo Allende. Sin embargo, la segunda mitad lo tuvo más contenido, como al resto del equipo, que se replegó ante el empuje de un rival que llegaba invicto y con ganas de demostrar por qué es candidato.
Columbus intentó hasta el final, pero se topó con una defensa firme y un Oscar Ustari que respondió con seguridad cada vez que lo exigieron.
El arquero argentino fue clave para sostener una victoria que vale más por el contexto que por el brillo. Con este resultado, Inter iguala en puntos al Crew, pero lo supera por diferencia de gol. En el banco, Javier Mascherano celebró como una final, sabiendo que no siempre se puede ganar jugando bonito. Y Messi, rodeado de ovaciones, se llevó otro récord a casa: el de haber sido la atracción principal del partido con mayor asistencia en la historia del estadio en Cleveland.
En las últimas horas de la noche de sábado, Charlotte FC venció a San Diego y superó a Columbus y a Inter en la tabla, con 19 puntos, aunque claro los de Miami y los de Cleveland tienen un partido y por eso siguen sosteniendose como los líderes virtuales.
Con Messi y un batallón de argentinos, Inter amenaza con ser protagonista en la MLS y en la Concachampions, en donde también tiene un andar inmejorable y debe enfrentar a Vancouver Whitecaps, en Canadá, el próximo jueves.