En enero de 2025, el Índice de Salarios creció 2,9 por ciento en promedio, mientras que la inflación fue 2,2 por ciento, según los datos del Indec. Mientras los salarios privados registrados crecieron levemente por encima de la inflación minorista, al marcar un ascenso de 2,2 por ciento respecto a diciembre, los salarios del sector informal subieron 8,6 por ciento, un alza que corresponde a meses atrás ya que esta estadística tiene rezago. Por el contrario, los salarios de empleados públicos crecieron apenas 0,9 por ciento en el mes.
La remuneración al trabajo asalariado registrado privado en el primer mes creció a raya con la inflación minorista en un escenario en que el Gobierno asegura no querer homologar paritarias superiores al 2 por ciento, mientras que la inflación parece salirse de esa línea (2,3 por ciento promedio en el primer bimestre).
En comparación con un año atrás, estos salarios crecieron más que la inflación con un alza nominal de 111 por ciento versus la inflación minorista de 84,5 por ciento. En este caso vale recordar que los datos del IPC del Indec subestiman la real inflación al confeccionarse sobre la base de una canasta con patrones de consumo desactualizados, donde los servicios –que aumentaron fuerte en el último año- tienen una ponderación menor.
Los guarismos del sector privado no registrado son mucho más abruptos, y esto no cierra, por ejemplo, con la escasa movilidad que tuvo el Salario Mínimo Vital y Móvil que apenas permite comprar la mitad de una canasta básica alimentaria. La suba del 8,6 por ciento mensual y 189,6 por ciento interanual responde a que computan ingresos de al menos cinco meses anteriores a enero de 2025, cuando la inflación también era más alta.
Por último, en el caso de los empleados públicos la pérdida salarial es palpable, con un incremento de apenas 0,9 por ciento intermensual en enero de 2025 y una clara caída a lo largo del último año. Sin embargo en la comparación contra enero de 2024 se ubicaron 97,5 por ciento arriba, es decir que superaron a la inflación.
