La reflexión de Antonio Aracre era válida. En ese país, como en todo el mundo, sobre el mismo hecho y basados en las mismas imágenes, muchas veces hay dos lecturas absolutamente antagónicas.

Si bien ese hecho no es privativo de la Argentina lo cierto es que en este país hay dos realidades y Pablo Duggan se lo tuvo que explicar al “experto” como para que lo entendiera: “Están los que se cagan de hambre y los que no”.

Lo cierto es que ni siquiera los que votaron a Milei lo hicieron para que “cagara” a los jubilados.