La influencer estadounidense Sam Jones causó indignación en Australia porque consideraron que hubo maltrato animal hacia la cría de un wombat salvaje.
No se pudo establecer con precisión dónde ni cuándo sucedió puntualmente, pero sí que fue reciente y que la influencer estadounidense Sam Jones tuvo que afrontar duras consecuencias por arrebatar de al lado de su madre a una cría de wombat salvaje, un animal característico de Australia, con el solo objetivo de tomarse unas imágenes junto a él.
"Acaba de atrapar un bebé wombat", dice el hombre que aparentemente filma y que, en paralelo, ríe a carcajadas de la situación.
La madre del pequeño animal inicialmente sale corriendo en dirección opuesta a la mujer, pero después vuelve sobre sus pasos, lo que provoca una nueva intervención del improvisado camarógrafo.
“Mira a la madre, persiguiéndola”, se jacta de inmediato el sujeto, mientras Jones se acerca corriendo con el animal en sus manos hacia el vehículo en el que él estaba. “Tengo un wombat bebé”, dice ella, emocionada, mientras la cría de esta especie de marsupial endémico de Australia parecía querer liberarse y emite algunos sonidos.
El video, que la influencer compartió Jones con sus 92.000 seguidores de Instagram, prosigue con la joven dando cuenta de la presencia de la mamá del wombat y de su intención de devolverlo junto a ella.
Según National Geographics, los wombats son animales herbívoros autóctonos de Australia de patas cortas y poderosas, y garras fuertes y afiladas que lo convierten en excelentes excavadores. Pueden medir hasta un metro de largo, tienen patas gruesas, pelo marrón, una cola corta y hábitos nocturnos.
El del video, específicamente, es un wombat común y no es una especie amenazada, aunque en los últimos años la especie registró problemas de salud por culpa de la propagación de la sarna.
Las otras dos especies de estos marsupiales, el de nariz peluda del sur y el de nariz peluda del norte, están “casis amenazados” y “en peligro crítico” por la Lista Roja de la UICN, respectivamente.
Un video que causó indignación en Australia
Si bien de inmediato la mujer afirma que deben dejar ir al animal, la secuencia protagonizada por Jones y su compañero causó una fuerte indignación en Australia.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, fue uno de ellos. "Separar a una cría de wombat de su madre, y claramente causarle sufrimiento, es simplemente indignante (...) le sugiero que pruebe con otros animales australianos”, deslizó.
Y agregó: “Separa una cría de cocodrilo de su madre y verás qué tal te va". Albanese también describió a los wombats como "criaturas gentiles y encantadoras".
Por su parte, el profesor Barry Brook, ecologista de la Universidad de Tasmania, dijo en declaraciones recogidas por CNN que “arrancar a un bebé de su madre, huir con él y tenerlo colgando en las manos es algo bastante común entre las cosas que no se deben hacer”.
El profesional afirmó, en paralelo, que los wombats generalmente no atacan a los humanos, pero que sus potentes garras podrían causar daños graves e infecciones en la piel humana si se decidieran a hacerlo.
“No es una situación en la que ni tú ni ningún otro miembro del público debamos ponernos en peligro ni por el bien de los animales ni por el nuestro. Y difundir esto en redes sociales para conseguir 'me gusta', 'visitas', etc., como influencer es totalmente contraproducente”, añadió Burke.
La Ley de Protección Ambiental y de Bioseguridad de Australia, que rige desde 1999, establece que es ilegal dañar o capturar cualquier especie silvestre nativa en Australia. Ese comportamiento, especifica la normativa, puede significar multas de hasta 300.000 dólares australianos (casi 190.000 dólares).
La drástica consecuencia que afrontó la influencer en Australia
Los usuarios de las redes sociales, principalmente en Australia, consideraron que se trató de un caso de maltrato animal y también manifestaron su descontento por la actitud de Jones, quien después de conocerse este episodio bloqueó sus cuentas de redes sociales, donde se presenta como "bióloga de vida silvestre y científica ambiental".
Antes de hacerlo, de acuerdo con los registros de CNN, la joven de Montana se defendió de las acusaciones. "Se adentraron juntos en el bosque, completamente ilesos" y "Nunca capturo animales que puedan resultar dañados por mi captura", fueron algunos de sus argumentos.
El caso llegó hasta el ministro del Interior australiano, Tony Burke, quien admitió que estaban revisando su visa y advirtió que sería cancelada si comprobaban alguna actitud irregular.
Según informó el canal ABC, en medio de este contexto Jones abandonó el país oceánico por su propia voluntad. "Nunca ha habido un día mejor para ser un bebé wombat en Australia", celebró Burke.
Te puede interesar...
Lo más leído
Dejá tu comentario