Si Foster Gillett es el trailer, la película de las SAD no va a ser taquillera en Argentina
El desembarco del empresario estadounidense en el fútbol nacional ya acumula varios contratiempos. Su palabra quedó dañada y puso en alerta a los clubes.
El efecto revolucionario de la llegada de Foster Gillett al fútbol argentino se desinfló más rápido de lo que hasta el más pesimista hubiera creído. Su palabra se dañó a partir de varias inversiones prometidas que no se cumplieron y le hacen mala publicidad a las sociedades anónimas deportivas (SAD).
El año pasado, el gobierno nacional arremetió contra la AFA al intentar habilitar a las SAD en los clubes argentinos. La entidad que preside Chiqui Tapia resistió pero la semilla quedó y el debate sigue latente.
El primer dirigente en hacer una apuesta fuerte en ese sentido fue Juan Sebastián Verón en Estudiantes de La Plata. El presidente del Pincha propone un modelo mixto que aún debe ser aprobado por la asamblea de socios y fue quién acercó a Foster Gillett.
El empresario estadounidense tiene un largo historial en el fútbol internacional con mejor resultado en los negocios que en los resultados deportivos.
El desembargo de Foster Gillett fue fuerte. Antes de saber si en Estudiantes iba a tener luz verde de los socios, ejecutó la claúsula de salida de Cristian Medina en Boca para que juegue en el Pincha. Fue con una inversión importante de 15 millones de dólares.
Rápidamente anunció otros acuerdos con clubes argentinos para comprar los pases de Rodrigo Villagra (11.5M) a River y Valentín Gómez (8.5M) a Vélez. A Estudiantes también le prometió un préstamo de 10 millones de dólares. Hasta ahora, lo único que pagó fueron los 15M de Medina.
Villagra y Gómez, dos fracasos de Foster Gillett
Después de llegar al acuerdo por los montos, los días pasaron y el dinero no apareció. Tanto Villagra como Gómez, que tenía todo listo para jugar en Udinese, quedaron marginados y debieron entrenarse por su cuenta.
Se cumplieron los tiempos límites, Foster Gillett y su entorno no dieron respuestas y los pases se cayeron. Gómez volverá a Vélez y su destino es incierto. Villagra, sin lugar en el Millonario, podría seguir su carrera en CSKA de Moscú que pagaría un monto bastante menor al que iba a abonar el empresario.
La credibilidad y el sustento financiero del estadounidense quedaron por el piso. Parece difícil que otros clubes vuelvan a negociar con él más allá de Estudiantes.
Verón y el gobierno quedaron en jaque
El acuerdo de Foster Gillett con Estudiantes pende de un hilo. La asamblea de socios para tratar el tema se dilató y cada día que pasa se ve más complicado que se haga.
Verón, consciente de su papel en esta historia, advirtió que si no se cierra el acuerdo el más dañado sería él. «Si no sale, me llevará puesto a mí», reconoció.
🗣️ Juan Sebastián Verón, en exclusiva con TyC Sports, habló sobre las autoridades que tiene Foster Gillett en Estudiantes: “Si bien tiene presencia dentro de la sociedad y es partícipe, no tomará decisiones importantes” pic.twitter.com/AE6KJoEJwL
— TyC Sports (@TyCSports) January 17, 2025
«Sea cuál sea la situación, se levanta la cabeza y se avanza. Siempre», fue el mensaje que compartió hoy en sus redes sociales. El desenlace aún es incierto y en La Plata dicen que el presidente podría buscar otros inversores si se cae lo de Foster Gillett.
Quiénes también depositaron su confianza en el empresario fueron los funcionarios del gobierno nacional que promueven las SAD como el Secretario de Turismo, Ambiente y Deportes, Daniel Scioli y la diputada Juliana Santillán.
El presidente, Javier Milei, publicó un DNU que habilita a los clubes a transformarse en una SAD con el aval de sus socios. Sin embargo, la AFA prohibe que clubes con ese modelo participen de los torneos oficiales.

El gobierno le dio un año a AFA para que se adecúe pero Tapia, recientemente reelecto hasta 2028, tiene el respaldo de los clubes y no parece que fuera a claudicar. De hecho tuvo un sorpresivo acercamiento con funcionarios del gobierno en la presentación de Argentina como sede para el Mundial 2030.
En este panorama, la caída en desgracia de Foster Gillett es paso en falso para los promotores de las SAD. Este inicio poco auspicioso pone mayor presión a los próximos inversores que quieran llegar al fútbol argentino.
Sin embargo, hay varios empresarios que harían el intento a los que el gobierno podría respaldar para intentar dejar rápido en el olvido a Foster Gillett. El que ya mostró su interés es Jorge Más, máximo accionista del Inter Miami, y su hermano José Más, que mantuvieron recientemente una reunión con Milei.
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