Un niño de un año y once meses falleció el lunes por la tarde tras caer en una pileta en un quincho de alquiler ubicado en el departamento de Maipú, provincia de Mendoza.
Según informó el Ministerio de Seguridad y Justicia, el menor fue trasladado al Hospital Paroissien, donde ingresó sin signos vitales a las 18:28 horas.
A pesar de los esfuerzos médicos, los especialistas no pudieron reanimarlo y confirmaron su deceso por un paro cardiorrespiratorio causado por ahogamiento.
De acuerdo con las primeras investigaciones y según informó el diario Los Andes, el incidente ocurrió en un inmueble situado en la intersección de calle Perito Moreno y Callejón Lima. Durante un momento de descuido de los adultos presentes, el niño cayó al agua. Minutos después, fue encontrado en la pileta y trasladado de inmediato al hospital más cercano.
El caso está siendo investigado por la Oficina Fiscal de Maipú, que se encuentra a cargo de las actuaciones correspondientes. Las autoridades buscan esclarecer las circunstancias exactas en las que ocurrió el trágico accidente, mientras se recopilan testimonios y se analizan los hechos.
Este lamentable suceso pone de relieve la importancia de extremar las medidas de seguridad en espacios con acceso a piletas, especialmente cuando hay menores presentes.
A principios de este mes y en un caso con aristas trágicas muy similares y también en la provincia de Mendoza, un niño de 5 años murió ahogado en la pileta del Marista Rugby Club. La tragedia ocurrió mientras el menor participaba de la escuela de verano que ofrece la institución. El caso ya está bajo investigación de la Justicia y le practicarán una autopsia al cuerpo del menor para comenzar a esclarecer el caso.
El predio está ubicado en Terrada y avenida Malabia, en Luján de Cuyo. Desde allí hicieron el llamado al 911 que alertó a las autoridades de la tragedia. Aunque las ambulancias del Servicio Coordinado de Emergencias y los patrulleros de la Policía de Mendoza llegaron con urgencia, no pudieron hacer nada para salvar al nene.
Luego de que los médicos confirmaran la muerte, la fuerza provincial notificó al Ministerio Público Fiscal y tomó intervención Gustavo Pirrello, fiscal especializado en Homicidios y Violencia Institucional.
“Toda muerte llega a esta fiscalía hasta que se hagan las averiguaciones iniciales”, le aclaró una fuente del caso, y señaló que no establecerán una hipótesis hasta tener los resultados de la autopsia.
En un comunicado, el Ministerio Público Fiscal indicó que el examen al cuerpo del niño fallecido es la “prioridad absoluta” de la fiscalía. Pirrello, además, les exigió a las autoridades del Marista que entreguen informes relativos a la habilitación municipal que debe tener el club para las actividades de la escuela de verano.
También se dio intervención “a los equipos especializados que integran los cuerpos de Atención y Ayuda a las Víctimas, a los fines de brindar contención a los familiares y allegados a la comunidad en la cual se desarrollaba el pequeño”, notificó el MPF de Mendoza.
Por ahora no trascendieron detalles del contexto que rodeó la tragedia, y tampoco está claro si el chico estaba compartiendo la pileta con otros menores, o si en la zona había guardavidas. “Lo sabremos cuando se empiecen a tomar declaraciones a los testigos”, afirmaron las fuentes consultadas.
Marista Rugby Club es una institución con más de 1.500 socios activos. El predio tiene 14 hectáreas y cuenta con cinco canchas de rugby profesional, otras tantas para categoría infantil, dos canchas de hockey sintético, un Centro Deportivo Integral con gimnasio, fisioterapia, sala de video y duchas, según consta en su página web oficial.
Y entre los servicios que ofrecen -además de la pileta-, hay una cantina con salón de eventos y quincho para 300 personas.
