Mariscos, chocolate, vino, frutos secos pero sobre todo: deseo.
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Mariscos, chocolate, vino, frutos secos pero sobre todo: deseo.
Celebrar el Día de los Enamorados, con un encuentro íntimo reclama imaginación, intensión, pero sobre todo ganas de brindarse al otro. Buscar las formas de que ese encuentro quede en la memoria, en los recuerdos como un buen momento o una experiencia que merece ser recodardada o incluso repetida, puede llevar a pensar en un lugar especial, una prenda, algo que compartir, para elevar ese deseo de estar juntos.
La doctora Florencia Herrera, sexóloga, aclaró algunos de los mitos y verdades sobre la comida afrodisíaca, una de las tantas formas de llegar al placer. La doctora explica que los afrodisíacos no solo actúan por sus componentes químicos, sino por la manera en que se incorporan en un encuentro íntimo. "No solo hay alimentos que, por su composición, pueden generar un estímulo, sino que la combinación de ellos y el contexto en el que se consumen juegan un papel fundamental", explica.


El momento, la creatividad y la forma en que se presentan son claves para que estos alimentos realmente contribuyan a un encuentro erótico. Asimismo, destaca que estos productos no son un tratamiento para el deseo sexual hipoactivo. "Si quisiéramos usarlos como tratamiento, necesitaríamos dosis enormes. Sin embargo, en un momento específico, cuando quiero hacer algo diferente, ahí es donde entran en juego los afrodisíacos", señala.
Uno de los errores más comunes es ingerir grandes cantidades de comida antes de un encuentro íntimo, lo que puede generar pesadez y desviar la sangre hacia el aparato digestivo en lugar de los órganos sexuales. "Las raciones deben ser pequeñas. El objetivo es que sean un accesorio, un estímulo, y no un distractor", enfatiza Herrera.
Además, el placer no solo proviene del alimento en sí, sino de cómo se consume. "Hay que saborear, jugar con la textura, observar cómo lo come el otro. La mirada y la forma en que se disfruta el alimento son más afrodisíacos que el propio ingrediente", sostiene.
Los clásicos: chocolate, frutillas y vino tinto
Dentro de la lista de los alimentos afrodisíacos más conocidos están el chocolate, las frutillas y el dulce de leche. "Siempre aparecen en imágenes eróticas y suelen estar acompañados de una copa de vino tinto", menciona la experta. Pero, advierte que el consumo de alcohol debe ser moderado: "El vino tiene antioxidantes que mejoran el flujo sanguíneo, lo que contribuye a una mejor respuesta fisiológica. Pero en exceso, el alcohol es un inhibidor del deseo sexual".
Asimismo, los frutos secos como nueces y avellanas también pueden ser beneficiosos gracias a sus antioxidantes. Otro ejemplo es la maca, un alimento utilizado históricamente en diversas culturas por sus propiedades estimulantes y su relación con el aumento de la fertilidad.
Deseo espontáneo y adquirido: el papel de los afrodisíacos
La doctora Herrera resalta que existen dos tipos de deseo sexual: espontáneo y adquirido. "El espontáneo surge de manera natural, sin necesidad de estímulos externos. En cambio, el deseo adquirido es aquel que se construye en el momento, con palabras, miradas y estímulos sensoriales", explica.
En este sentido, los alimentos afrodisíacos cumplen un rol fundamental en la estimulación del deseo adquirido. "No es necesario ser un chef. Con algo tan simple como un chocolate y una copa de vino se puede activar el deseo en la otra persona", afirma.
En tiempos en los que las relaciones virtuales, la inteligencia artificial y el sexo digital están en auge, la doctora Herrera hace una reflexión sobre la importancia de mantener la conexión humana. "No vamos a dejar morir a San Valentín en una era donde la tecnología avanza sin pausa. Es momento de apagar el celular, mirarnos a los ojos, compartir una comida y disfrutar del encuentro físico", sostiene.
Finalmente, destaca que lo esencial en la intimidad es la comunicación, el consentimiento y los sentimientos. "Humanicemos el erotismo, el beso, el abrazo, el silencio y el grito en la pareja. Porque, al final del día, el verdadero afrodisíaco es la conexión entre dos personas", concluye la especialista.