Santiago y Emily fueron una de las parejas más reconocidas que surgieron del reality de Netflix Love Is Blind. Muchos recuerdan el video en el que el participante le confiesa que había soñado con ella incluso antes de conocerla.
Tal como establece la dinámica de la competencia, la pareja se casó y su matrimonio duró casi un año, hasta que, en las últimas horas, se supo que ella sufría violencia por parte de su marido.
Según reveló la cuenta de X de LAM, el matrimonio se terminó por la violencia que ejercía Santiago Martínez sobre Emily Ceco. “Él la golpeaba. Ella logró separarse. Todo venía bien y de repente el infierno. El amor puede ser ciego pero no violento. Viene Emily a contar el infierno que vivió ”, publicaron en El ejército de LAM sobre la pareja que llevaba más de un año de relación.
En horas del mediodía, la mujer de 25 años visitó el streaming de Bondi y allí mostró su rostro golpeado. “Estoy bien, acompañada de mi familia. Estoy con anteojos pero me los voy a sacar así ven”, dijo y allí se la pudo ver con moretones.
En la entrevista con Federico Bongiorno y Pepe Ochoa, relató uno a uno todos los episodios de violencia de género que sufrió.
Según detalló, a Martínez, no le gustó que participara del show e interactuara con los artistas. Ceco contó que se cambió y pidió un auto para irse de la casa: “La llamé a mi mamá para avisarle que me iba y él me sacó el teléfono de la mano antes de que me atienda y con mirada amenazante me puso el teléfono en la cara para controlar lo que yo decía. Cuando le dije ‘ma me parece que voy a casa ahora’ me cortó la llamada y me dijo: ‘vos no te vas a ningún lado’”. Ella le pidió por favor que la dejara irse y se corriera de la puerta de la habitación.
Siguiendo con su relato, comentó que, en ese momento, empezó a juntar sus cosas para irse y él la golpeó en la cabeza de espaldas. “Le dije ‘por favor no me pegues’ y me dice ‘sos una p***’ y me pegó dos trompadas más. Me paré y me quise ir de la habitación, pero me trabó contra la puerta y me empujó contra la cama (...) ahí me empezó a ahorcar con mis brazos”, explicó y mostró las marcas que le quedaron en los brazos y el moretón del ojo izquierdo.
“Le decía ‘por favor Santiago dejame’. Yo estaba toda chiquitita contra la cama y le empecé a pegar con las rodillas en la espalda para que se vaya y me dice ‘me estás pegando hija de p***. Hace dos horas no llorabas, llorá ahora (...)’”, relató Emily entre lágrimas y agregó: “Lo empujé y le pegué una patada en los huevos. Se tiró contra mí y me empezó a ahorcar y me tapaba la boca para que no grite. Le mordí la mano para que me soltara y ahí me pone la cara contra la cama y me empieza a pegar en la cabeza. Le pedía por favor que parara; empecé a gritar por ayuda y me tapó la boca y me empezó a ahorcar”.
El desgarrador relato siguió y Ceco contó que, tras lo que pasó, Santiago no la dejaba salir de la casa. Emily relató que, por miedo, le hizo creer que se iba a quedar, que lo iba a perdonar y que no iba a denunciarlo: “Fingí hasta el domingo a la tarde que estaba todo bien”. Asimismo, contó que sentía mucho dolor por los golpes en la cara, pero que él todo el tiempo buscaba restarle importancia y le pedía perdón.
El domingo a la tarde, cuando Santiago salió a sacar la basura, se comunicó con su hermana para pedirle ayuda y le mostró como tenía la cara. Le pidió un auto y cuando encontró la oportunidad, se fue de su casa con la ropa que tenía puesta y las llaves: “Me escapé de mi casa y con mucho miedo”. Emily se fue a la casa de su hermana y rápidamente empezó a recibir mensajes de Martínez, quien incluso la acusaba de haberse ido “con otro”.
“Tenía la decisión de denunciarlo desde el minuto uno, pero quería esperar para hacerlo porque estaba muy mal”, expresó la joven. A su vez, contó que Martínez le enviaba mensajes todo el tiempo e incluso llego a decirle que, aunque no volvieran a estar juntos como pareja, tenían “trabajos pautados por San Valentín” que cumplir. Ella al final terminó accediendo, pero su hermana le prohibió volver a acercarse a él y le sacó el teléfono. Él llegó a pedirle que se escapara para poder hacer los trabajos: “Le decía que sí, para que él esté tranquilo hasta que yo tuviera la perimetral”.
Emily explicó que denunció a su ex por violencia de género y que, además de la perimetral, tiene un botón antipánico. Ella lo bloqueó de las redes, por lo que él empezó a mandarle mails: “Me pedía por favor que no hiciera la denuncia pública porque quería seguir trabajando”. El lunes a la mañana fue al departamento a buscar ropa porque pensó que no estaba, pero la esperaba y llegó a pedirle “perdón de rodillas y llorando”.
