Sorpresa en la Hidrovía: el Gobierno dio de baja la licitación porque hubo solo una oferta

Los interesados en el proceso de la licitación para la concesión del dragado de la Vía Navegable Troncal (VNT) de los ríos Paraguay y Paraná, más conocida como la "Hidrovía", abrieron la web de ContratAR y dijeron que no lo podían creer. En pleno desconcierto, al mediodía de este miércoles, fuentes bien empapadas sobre el proceso aseguraban que no tenían explicaciones ni podían comprender qué había pasado.

El Gobierno recibió solamente una oferta: la presentó la empresa belga Dredging Environmental and Marine Engineering NV (DEME), que denunció desde el principio que el pliego estaba direccionado para que ganara el también belga Jan de Nul, anterior licenciatario de la concesión hasta 2021, que continúa dragando ahora con un contrato con la ex Administración General de Puertos (AGP).

Después de 4 horas de confusión y rumores, en las que se fue postergando sucesivamente una conferencia de prensa anunciada desde temprano, el vocero presidencial Manuel Adorni informó que darán de baja la licitación e investigarán a DEME, el único oferente.

"Esta Administración comunica que ha decidido dejar sin efecto el actual procedimiento de selección, en pos de conseguir una licitación con verdadera competencia de precios entre oferentes; y que se instruirá la intervención de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) para que investigue la posible presión por parte de la única oferente sobre las restantes empresas, o la existencia de una connivencia entre las mismas en perjuicio del Estado Nacional. Con los resultados de dicha investigación, la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPyN) se pondrá a trabajar en los nuevos pliegos", agregó en un comunicado oficial el Ministerio de Economía.

DEME, por su lado, jugó al suspenso. En las horas previas al cierre del plazo definió presentarse "con el objetivo de demostrar el costo real internacional que el sistema logístico argentino puede aspirar a tener". "Más allá de los aspectos técnicos direccionados, nuestra competitividad en precio y su excelencia técnica se demuestra en todos los mercados en los que trabajamos", dijeron.

La Hidrovía: los números del negocio

El negocio de la Hidrovía es el cobro de un peaje a los usuarios para financiar el dragado, señalización y mantenimiento, y su facturación estimada era de unos 20.000 millones de dólares por los próximos 30 años, con una posible prórroga por otros 30 años más, en el proceso que se acaba de dar de baja

El proceso de licitación se había lanzado en noviembre del año pasado y dependía formalmente de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPyN), en la órbita del ministro de Economía, Luis Caputo, después de la disolución de la AGP, que dependía del jefe de Gabinete, Guillermo Francos.

No obstante, el asesor presidencial Santiago Caputo comandó la operación y mantuvo varias reuniones con interesados en el tema.

La importancia de la Hidrovía radica en que el 80% de las exportaciones de la Argentina, equivalente a unos US$ 60.000 millones, salen por esos ríos. La licitación despertó el interés de la política y generó una de las principales diferencias entre el presidente Javier Milei y el ex mandatario Mauricio Macri.

Los principales usuarios de la vía navegable son las grandes multinacionales cerealeras, entre otros:

• La china Cofco
• La estadounidense Cargill
• La francesa Louis Dreyfus Company (LDC)
• La neerlandesa Bunge

Todas ellas, al igual que la argentina Aceitera General Deheza (AGD, del cordobés Roberto Urquía) tienen una participación decisiva en la cadena de valor de la agroindustria, el principal complejo exportador de la Argentina, pero también del acero.

Brasil y Paraguay también usan la Hidrovía para salir por el Río de La Plata hasta el Océano Atlántico. De hecho, el grupo carnicero brasilero J&F tiene previsto aumentar su producción de hierro en la mina que le compraron a Vale por un total de 50 millones de toneladas que cargará a esa vía.

El plazo para la presentación de ofertas venció este miércoles a las 13 horas. Hubo 11 constructoras que participaron del proceso enviando propuestas, pero solamente una, DEME, confirmó su interés y presentó su oferta, aunque mantuvo el suspenso hasta el último momento.

El pliego estableció una tarifa máxima de 4,30 dólares por tonelada en el primer año, equivalente a unos US$ 410 millones en total por toda la carga transportada; al segundo año trepa a US$ 5,20 y desde el tercero, a US$ 6,30. Es decir, más de 630 millones de dólares anuales, crecientes si aumentaba la producción agropecuaria o de otros bienes (como el hierro) en la región.

Una de las empresas interesadas, como la brasilera DTA Engenharia, considera que incluso con una tarifa de US$ 2,20 a US$ 2,50 por tonelada el negocio es rentable.

En materia técnica, el martes a la tarde la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA) había dictaminado que habían “serias y evidentes irregularidades” en la licitación, que fueron denunciadas tanto desde empresas como DEME -la única participante confirmada-, la danesa Rhode Nielsen, embajadores extranjeros y políticos del PRO y la Coalición Cívica.

Asimismo, la empresa china CCCC Shanghai Dredging Company (SDC) había quedado excluida expresamente, ya que el Gobierno decidió que no pudieran participar firmas que tienen como controlantes a un Estado soberano.

En materia geopolítica Estados Unidos está muy interesado en que China no pudiera tener el control de la vía navegable más grande del mundo, aunque los orientales ya activaron contactos diplomáticos.

La Argentina debe negociar a mediados de este año, por segunda vez en la era Milei, la renovación del swap de monedas -un préstamo- con China por unos US$ 17.700 millones, que se cuentan dentro de las reservas del Banco Central (BCRA).