La Policía de la Ciudad desbarató una red de contrabando de animales domésticos y silvestres en el barrio de Nueva Pompeya, en el sur de la ciudad, luego de que se haya llevado a cabo la detención de un hombre en una feria de esa localidad. Se secuestraron siete especies en total y también remedios para la que no tenían permisos, y las condiciones de higiene eran escasas. Intervino la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA).
Todo comenzó por una postal inconvenientemente común: un hombre estaba en la Feria de Pájaros de Nueva Pompeya, en Avenida Sáenz al 700, en un puesto que consistía, en realidad, de tres cajas de cartón en las que había tres cachorros de caniche toy, exhibidos para su venta.
Los agentes que dieron cuenta de la situación eran de la División Delitos Ambientales junto con Contravenciones y Faltas y del Cuerpo de Investigaciones Judiciales, ambas instituciones del Ministerio Publico Fiscal porteño. Inspeccionaron otros puestos y encontraron más de 150 animales en condiciones de maltrato.
La Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA) fue la encargada de continuar el procedimiento. Se detuvo al vendedor de caniches de la feria de Nueva Pompeya y se le labró, en inicio, un acta por infracción a la Ley de Protección de Animales (Ley 14.346). Pero también se determinó continuar el allanamiento hacia el interior de la feria, en donde el panorama no hizo sino empeorar.
Además de caniches, había cachorros de chihuahuas, salchichas y chow chow, todos para la venta, algunos en malas condiciones de hidratación y de alimentación. También conejos, hamsters, ardillas del desierto, cobayos, ratones y aves de distintas especies. El comercio de todas estas especies de animales está prohibida por ley.
Los agentes hallaron en la feria puestos enteros dispuestos para la venta de animales. También encontraron remedios para esos y otros animales, así como distintos tipos de suplementos, para cuya posesión y distribución no había permiso. Tanto los animales como los remedios fueron decomisados. El saldo de animales rescatados fue de 92 aves,16 perros, seis gatos, 53 conejos, 26 hamsters, doce ratones y tres ardillas.
La UFEMA resolvió que las aves fueran llevadas a la Reserva Ecológica de Costanera Sur, y una vez allí liberadas. Respecto de la medicación, se dispuso además del secuestro, solicitar documentación de origen, de SENASA y la desvinculación del rubro para los vendedores. En total, se incautaron 262 fármacos, en sus diversas composiciones.
La cría y la venta ilegales de animales son una problemática a la que tanto la UFEMA como la Policía de la Ciudad prestan especial atención. En octubre pasado, se habían secuestrado más de 50 caniches toy en un criadero en el barrio de Flores.
El caso de octubre, que también quedó bajo la instrucción del fiscal Carlos Rolero Santurián (UFEMA), investigó la posesión de 57 perros para su cría o venta, que fueron encontrados en un patio en el que convivían además toda clase de muebles viejos y sucios, un auto desvencijado, trapos hechos harapos y residuos, metales y piedras. Además de los perros, diez jaulas y apenas cinco bolsones de comida.
Conejos, ardillas del desierto, cobayos y hámsters también fueron decomisados en Nueva Pompeya. Foto Policía de la Ciudad
Varias especies de aves fueron encontradas para su venta en la feria de Nueva Pompeya. Foto Policía de la Ciudad.
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