La actriz Aitana Sánchez-Gijón ha enarbolado una discurso en el que ha repasado toda su trayectoria por “los teatros de toda España” y ha destacado que en muchos casos ha sido “precoz”. En él también ha destacado el papel de su madre para poder ser actriz. “Eres el motor de mi vocación, mi gran cómplice. Sin tu apoyo, respeto y confianza no habría sido posible”, ha remarcado.

La ganadora del Goya de Honor también ha dejado una buena parte para hacer un alegato político en defensa de las mujeres cineasta. Ella ha trabajado con 40 directores y solo cuatro han sido mujeres. “Hoy sois muchas más, no solo directoras y guionistas”, ha asegurado Sánchez-Gijón, que también ha recordado el discurso de Marisa Paredes en la famosa gala del No a la guerra. Parafraseándola ha asegurado: “No hay que tener miedo a la cultura, miedo a la ignorancia, al fanatismo, a la violencia, hay que tener miedo a la guerra”. Y ha añadido: “Hay que tener miedo a los nuevos imperialismos y a las limpiezas étnicas”. Una clara referencia a la situación en Gaza