Con el calor, encontrar formas económicas y saludables de mantener la casa fresca se ha convertido en una necesidad para muchas familias. El aire acondicionado, aunque efectivo, puede significar un gasto elevado y algunos riesgos para la salud, como la irritación respiratoria y la sequedad de ambiente.
Sin embargo, existe un truco que pocos conocen y que los arquitectos suelen recomendar para reducir la temperatura interior sin necesidad de este electrodoméstico: el uso estratégico del ventilador.
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El truco de la toalla mojada: frescura al alcance de todos
Difundido por el arquitecto y tiktoker Leonardo Rogel, este método es sencillo y requiere de un ventilador y una toalla húmeda. Siguiendo los pasos indicados, se consigue reducir el calor sin el costo energético del aire acondicionado:
- Mojar una toalla y colocarla detrás del ventilador, sin que toque las aspas, permitirá que el aire circule de manera refrescante por la habitación.
- Posicionar el ventilador frente a una ventana abierta también es clave. Esto ayuda a que el aire caliente salga del cuarto, mientras el aire fresco generado por la toalla húmeda se distribuye mejor.
Una alternativa sostenible y económica
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Este truco aporta varios beneficios importantes:
- Ahorro energético significativo: Un ventilador consume mucha menos energía que un aire acondicionado, reduciendo la factura de electricidad.
- Beneficios para la salud: Al no generar sequedad en el aire, el método permite mantener un ambiente húmedo y saludable para las vías respiratorias.
- Sostenibilidad: Este enfoque ayuda a reducir el uso de electricidad y es un pequeño cambio que contribuye al cuidado del medioambiente.
Para quienes buscan refrescar sus espacios sin altos costos ni efectos en la salud, este método es una opción ideal. Además, resulta ser una recomendación ampliamente valorada por arquitectos y expertos en diseño interior, quienes promueven este tipo de prácticas en el hogar.
