Juicio por la muerte de Lucas Lin: la declaración clave de uno de los testigos en la causa

El pasado viernes, se cerró una nueva semana judicial por el trágico caso que tuvo como víctima a Lucas Lin, el pequeño de 5 años que se ahogó en una pileta de natación en el año 2019, mientras se encontraba en la colonia de vacaciones del Colegio Lincoln, en Hernández. Allí, tres nuevos testigos se presentación para intentar ayudar con la investigación y para aportar cosas nuevas al caso. Uno de ellos fue el médico autopsiante, Santiago Paredes. El legista explicó las causas que provocaron el deceso del pequeño -asfixia por sumersión-, entre otras cuestiones que hacen a su arte o profesión, mientras que dos docentes completaron la ronda de declaraciones. Según fuentes de tribunales, estos últimos aportaron lo que conocían de la organización del lugar, sus actividades, división de roles y rangos en la toma de decisiones. Dicho proceso continuará el lunes a las 10 de la mañana, jornada en la que se tiene previsto terminar con la prueba del bloque acusador, para así comenzar con el descargo de las defensas y definir la fecha de los alegatos. De todas formas, informaron que se puede sumar otro día de testimoniales, porque aún quedarían por ser escuchadas dos personas propuestas por quienes impulsan la acción, que estarían fuera del país. LE PUEDE INTERESAR Tensión y susto por un auto que apareció "bajo intensas llamas" y que despertó a vecinos con una explosión en La Plata LE PUEDE INTERESAR Detuvieron a un hombre por una pelea callejera y por destrozar un vehículo en una estación de servicio de La Plata Santiago Paolini es el magistrado que preside el debate, acompañado de sus colegas Andrés Vitali y Eduardo Domenech. La fiscal es la doctora Helena de la Cruz, mientras que la familia Lin está representada, en la figura de particular damnificado, por los abogados Matías Pietra Sanz y Andrea Reynoso. La plataforma fáctica, como este diario ya indicó en ediciones anteriores, va desde el abandono de persona seguido de muerte, el homicidio culposo, el incumplimiento de los deberes de funcionario público y falsedad ideológica de instrumento público. Colocadas en esas figuras típicas están los distintos imputados, entre ellos el propio dueño del centro educativo, Rubén Monreal, quien después de vaivenes en el expediente, quedó sentado en el banquillo.