Los narcos agudizan cada vez más el ingenio para que la droga llegue a destino, especialmente porque las fuerzas de seguridad también se capacitan para contrarrestar este delito que genera cifras millonarias de ganancias. Los delincuentes buscan lugares insólitos para camuflar el estupefaciente.
Dos de ellos fueron descubiertos ayer. Personal del Escuadrón 59 “Santiago del Estero” de Gendarmería Nacional realizaba controles de personas y vehículos sobre la Ruta Nacional 34, a la altura de la localidad de Las Tijeras, departamento Banda, en la lucha permanente contra el narcotráfico, el contrabando y otros delitos federales.
En esa circunstancia, los uniformados interceptaron la marcha de un colectivo afectado a un tour de compras. Los choferes informaron que habían partido de Orán, Salta, y se dirigían de regreso a la provincia de Buenos Aires.
Los uniformados realizaron una inspección ocular por los pasillos y en las bodegas, ocasión en la que posaron sus miradas en patinetas y rollos de cable coaxil que no son artículos que suelen llevar los pequeños comerciantes para revenderlos en ferias.
Las sospechas se incrementaron cuando tomaron contacto con las patinetas y los rollos: Eran muy pesados, más de lo normal,
Ante la presunción de que estarían ante un hecho delictivo, se informó el hecho al juez Federal Nº 2 de Santiago del Estero, Dr. Sebastián Argibay, quien ordenó que el procedimiento siguiera en la sede de la fuerza de seguridad.
Los uniformados rompieron el plástico que envolvían las patinetas y debajo de los cascos de protección encontraron “ladrillos” de cocaína; se secuestraron un total de 15 paquetes.
En tanto, dos rollos no estaban completamente con cables coaxil, solo la superficie; adentro había armado una estructura hueca donde había más paquetes rectangulares de la misma droga. En esos habitáculos se secuestraron 16 “ladrillos”.
Tras la intervención de los peritos de Gendarmería, se determinó que había 33,669 kilos de cocaína de máxima pureza, todo valuado en casi 500 millones de pesos.
Las averiguaciones realizadas por los gendarmes determinaron que los dueños de la droga era una pareja de nacionalidad boliviana, que está radicada en Buenos Aires. Ambos quedaron detenidos por infracción a la ley 23.737, por orden del juez Federal Argibay. Serán indagados la próxima semana.
