VIDEO. A dos meses del crimen, familiares y amigos de Lautaro Ithurrart pidieron justicia en La Plata

Este viernes familiares y amigos de Lautaro Ithurrart, el joven de 16 años asesinado de una puñalada en medio de una pelea entre dos grupos a las afueras de una fiesta clandestina en La Plata, marcharon hacia las fiscalías de 7 entre 56 y 57 para pedir justicia. Por el hecho hay un solo detenido y solicitaron la detención de cómplices, como también la condena máxima para el acusado. 

"Estamos en la fiscalía para que Betina Lacki nos de una explicación, que se haga justicia y queremos perpetua para el asesino de mi hijo. A él lo mataron de una puñalada y queremos que caigan los cómplices porque hay mucha gente que está involucrada y debe pagar por lo que hicieron. Tenemos las pruebas suficientes para que ese asesino quede detenido y no salga nunca más, al igual que sus cómplices", aseguró la madre en el acceso principal a las fiscalías platenses . Por último, afirmó: "Vamos a hacer el ruido necesario, hoy vino la familia, los amigos y los vecinos, todavía falta más gente que no pudo venir. Queremos justicia por 'El Plaga'". 

Quién era Lautaro Ithurrart, el joven de 16 años que asesinaron en La Plata

La víctima de la trágica noche del 3 de diciembre fue Lautaro Ithurrart, de 16 años. Esa noche, se había acercado a la fiesta junto a su hermano, de 18 años. Tras una pelea entre dos grupos por "disputas de barrio", el adolescente fue gravemente herido con un arma punzante en San Carlos, precisamente en 137 entre 35 y 36.

Fue llevado al Hospital Alejandro Korn de Melchor Romero, con una herida a la altura de su tórax izquierdo. Minutos después, aunque intentaron salvarle la vida, falleció. Según el parte brindado por la policía, un total de 14 personas fueron aprehendidos, entre ellos, el supuesto agresor de 40 años, que terminó imputado por "Homicidio en Riña, atentado y resistencia a la autoridad". Además de detener al supuesto agresor del chico fallecido, también se logró el secuestro de un cuchillo tipo carnicero mango madera marrón, aproximadamente a los pocos pasos del salón.

Minutos después, los demás participantes fueron liberados, menos quien sería el autor material del hecho, que a su vez, se constató que era dueño del quincho donde se llevó a cabo la fiesta.