Pakistán lanzó este jueves ataques aéreos contra presuntos escondites insurgentes dentro de Irán, causando la muerte de, por lo menos, nueve personas mientras respondía a un ataque similar realizado días antes por los iraníes y aumenta las tensiones con su vecino al tiempo que se intensifica el conflicto en Oriente Medio.
Los ataques sin precedentes por parte de Pakistán e Irán en cualquier lado de su frontera parecen estar dirigidos a los grupos armados baluches con objetivos separatistas similares. Los grupos se acusan mutuamente de proporcionar un espacio para los grupos en sus respectivos territorios.
El enfrentamiento entre Irán y Pakistán se produce mientras continúa la agitación en Oriente Medio causada por la guerra de Israel contra Hamás en la Franja de Gaza, y luego de los ataques aéreos iraníes perpetrados el lunes por la noche en Irak y Siria.
Amenazas insurgentes
Esos ataques fueron en respuesta a una bomba suicida en Irán por parte de combatientes del Estado Islámico a principios de enero que dejó más de 90 muertos.
Irán y Pakistán, que cuenta con armas nucleares, se han mirado desde hace tiempo con sospecha por los ataques de insurgentes, pero los analistas señalaron que los ataques de esta semana estuvieron motivados al menos parcialmente por presiones políticas internas.
Irán está lidiando con un malestar hacia su teocracia y ha enfrentado presión para llevar a cabo alguna acción desde el ataque suicida del Estado Islámico. También busca ejercer un poder militar en un momento en el que los grupos insurgentes a los que respalda en la región (Hamás en la Franja de Gaza, Hezbollah en Líbano y los rebeldes hutíes en Yemen) están participando en el conflicto israelí-palestino.
Pakistán, por su parte, no podía dejar los ataques aéreos de Irán del martes sin una respuesta, y enfrenta unas elecciones generales cruciales en febrero en las que sus fuerzas militares son una poderosa fuerza política.
“El gobierno y las fuerzas militares han estado bajo una enorme presión”, dijo Abdullah Khan, analista del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Seguridad de Pakistán. “Irán celebró el ataque (del martes) en su prensa y la percepción pública paquistaní de un ejército fuerte no es como solía serlo, así que tenía que responder”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Pakistán describió el ataque como “una serie de golpes militares muy coordinados y con precisión específicamente dirigida”.
El ejército paquistaní dijo que había utilizado drones de diversos tipos, cohetes y misiles que pueden lanzarse desde una aeronave a gran distancia del objetivo, lo que probablemente implicaba que los cazas paquistaníes no habían entrado en el espacio aéreo iraní.
La ONU pide moderación
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha pedido a Irán y Pakistán “máxima moderación” para evitar “una mayor escalada de las tensiones” tras el reciente ataque de Islamabad en el sureste del país vecino en respuesta a los bombardeos de la Guardia Revolucionaria iraní contra posiciones de un grupo terrorista en suelo paquistaní.
“Resalta que todas las preocupaciones de seguridad entre los dos países deben abordarse a través de medios pacíficos, con diálogo y cooperación, de conformidad con los principios de soberanía, integridad territorial y relaciones de buena vecindad”, ha subrayado su portavoz, Stéphane Dujarric, en un comunicado.
Esto se produce después de que las autoridades iraníes hayan denunciado la muerte de nueve personas, entre ellas cuatro niños, tras un ataque llevado a cabo por el Ejército de Pakistán contra supuestos “terroristas” en la provincia iraní de Sistán y Baluchistán, en el sureste del país.
Los ataques por parte de Pakistán han tenido lugar un día después de que la Guardia Revolucionaria de Irán bombardeara presuntas bases de terroristas en Pakistán, suceso denunciado por Islamabad, que afirmó que dos niños habían muerto en los ataques. Islamabad anunció el miércoles que llamaba a consultas a su embajador en Teherán y afirmó que el embajador iraní en Islamabad, que se encuentra en estos momentos de viaje en Irán, no volverá a su puesto “por ahora”.
Inestabilidad en la región
La región de Oriente Próximo está sacudida por la inestabilidad después de los ataques cruzados entre Irán y Pakistán, que se unen además a los bombardeos iraníes en Irak, donde atacó supuestas posiciones del Mossad israelí.
Estos episodios, unidos a la ola de ataques en el mar Rojo por parte de hutíes contra buques comerciales, que han recibido la respuesta de Estados Unidos y Reino Unido, han agravado la inestabilidad en la región, que tiene el foco puesto en la ofensiva de Israel contra Hamás en la Franja de Gaza.