Poco y nada se habló del botellazo que casi recibe Javier Milei mientras se dirigía desde el Congreso de la Nación hasta la Casa Rosada.
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Poco y nada se habló del botellazo que casi recibe Javier Milei mientras se dirigía desde el Congreso de la Nación hasta la Casa Rosada.
Ocurrió luego de que el Presidente recibiera el traspaso de mando por parte de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, y tras el discurso que brindó a los presentes desde las escalinatas del Palacio Legislativo.
Milei se subió a un vehículo descapotable junto con su hermana Karina, y ambos se realizaron el trayecto de 2,5 kilómetros de distancia entre los edificios históricos, en el corazón de la Ciudad de Buenos Aires.
Entre los miles de presentes, un salteño logró filmar el momento en que una persona le arroja al Presidente una botella: pasó muy cerca de la humanidad de los Milei, cruzó el descapotable y terminó impactando en uno de los custodios que iban junto al vehículo.
El hombre de seguridad se agachó luego de recibir el botellazo y luego se tomó de la cabeza, mientras la caravana continuaba su rumbo con el griterío de los presentes, lo que hizo que pocos se dieran cuenta de la incómoda situación.
Milei luego pidió frenar el descapotable, en pleno trayecto, para acariciar un perro y saludar a la gente, lo que reiteró cuando llegó a destino y antes de ingresar a la Casa Rosada, donde luego le tomó juramento a sus ministros.
El recorrido y la distancia entre el Congreso y la Casa Rosada
