Rival, competencia y escenario, tres rivales a vencer para Estudiantes

Estudiantes termina de pulir los detalles para su partido de semifinales de la Copa Argentina ante Boca, a jugarse el miércoles a las 21:15 en el estadio Mario Kempes de Córdoba. Por lo pronto sueña con alcanzar por primera vez ese objetivo, siempre esquivo.

Sin dudas que cada vez que el Pincha tiene que enfrentar al Xeneize se pone de manifiesto que se trata del rival que mayor diferencia le saca en el historial, al punto de ser el duelo más desparejo en el fútbol argentino. Con excepciones que le sonríen a lo de La Plata (la final que le ganó en 2006 en la cancha de Vélez, la primera de su especie), la brecha es de 59 partidos, seis más que a Huracán el otro rival al que más ha vencido a lo largo de la historia.

Otro obstáculo, el tercero, que el Pincha deberá superar es el escenario: el estadio Mario Kempes (antes Chateau Carreras u Olímpico de Córdoba) nunca fue un lugar muy accesible más allá de haber escrito allí uno de los capítulos más importantes de su historia: el título Soberanía 1982/83, con su victoria 2-0 sobre Talleres en la última fecha de la mano de Carlos Salvador Bilardo.

En Córdoba, no obstante, el Pincha ganó el partido más importante: fue campeón en 1982/3

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En ese escenario, en total, jugó jugó 37 partidos (ante Talleres, Belgrano, Instituto y rivales neutrales) de los cuales ganó 7, empató 11 y perdió los 19 restantes. Pasado mañana buscará escribir otra página dorada pese a las dificultades que ofrece el rival y su coyuntura: está obligado a ganar para seguir con chances de clasificar a la Copa Libertadores por la tabla Anual.

La última vez que Estudiantes ganó en ese estadio fue el 3 de diciembre de 2017, por la Superliga. Derrotó 1-0 a Talleres con un gol de Lucas Melano y rompió varias rachas. Básicamente dio la nota de la jornada y enfureció el entrenador local por el planteo utilizado: Frank Darío Kudelka. En el banco albirrojo estaba sentado Lucas Bernardi que logró esa tarde uno de sus mejores resultados como técnico albirrojo.

En la Sudamericana 2016 cayó con Belgrano

Después de ese partido volvió a jugar cinco año después con Ricardo Zielinski como entrenador. El Pincha venía muy bien, puntero y con un invicto de cinco fechas. Pero cayó 2-0 de manera injusta y se quedó con las manos vacías. Los goles fueron de Andújar en contra (cabezazo de Rafa Pérez, poste y espalda del arquero) y Carlos Auzqui.

Pero de partidos neutrales se trata jugó dos y los ganó. El primero fue el repechaje para clasificar a la Copa Libertadores 2017. El 28 de mayo del año anterior en esa cancha el Pincha derrotó 1-0 a Godoy Cruz y de esta manera obtuvo la medalla de bronce de aquel torneo y, de paso, el pasaporte a la fase de grupos de la máxima competencia. El gol lo hizo Juan Ignacio Cavallaro a poco de comenzado el encuentro.

También jugó allí en el torneo Nacional de 1985 ante San Martín de Tucumán, una fase de perdedores. Ganó el Pincha 1-0 el 10 de julio con gol de Guillermo Trama y se metió en la sexta fase, donde luego se cruzó con River en la cancha de Ferro y se quedó eliminado.

La sonrisa más grande

Tal como se mencionaba, el capítulo más importante lo escribió allí el 14 de febrero de 1983, con el 2-0 sobre la T, que le valió el título en el torneo Metropolitano de ese año y volver a la senda ganadora tras 13 años, ya que desde la Copa Libertadores de 1970 no era campeón. Y una racha de 16 años a nivel local, luego del Metro de 1967 que había ganado el equipo de Osvaldo Zubeldía.

En la Liga 2021 perdió 2-0 contra Talleres

Recientemente tiene una mala participación allí fue en la Copa Sudamericana 2016. El 15 de septiembre jugó el partido revancha ante Belgrano, por la primera ronda y luego de ganar 1-0 en La Plata perdió 2-0 con dos goles de Claudio Bieler, resultado que lo eliminó de la competencia. El partido fue de los más raros porque el Pincha no mereció perder, pero esa noche pagó muy caro cada error.

Una dolorosa derrota fue en el torneo Clausura 1993. Ganaba 2-0 por los tantos de Mauro Amato y Rubén Capria, de penal. Pero en el segundo tiempo todo cambió y el Pincha terminó cayendo 4-2 con múltiples horrores defensivos que pegaron fuerte.

El triunfo de Estudiantes en febrero de 1983