El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que no había cambiado su opinión de que el presidente chino, Xi Jinping, era efectivamente un dictador, después de la cumbre que mantuvo con aquel.
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El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que no había cambiado su opinión de que el presidente chino, Xi Jinping, era efectivamente un dictador, después de la cumbre que mantuvo con aquel.
La agencia de noticias Reuters interpretó que ese comentario "probablemente aterrizará con un ruido sordo en Pekín".
Biden celebró una conferencia de prensa en solitario después de cuatro horas de conversaciones con Xi en las afueras de San Francisco.
Al final de la conferencia de prensa, le preguntaron si todavía creía que Xi era un dictador, algo que había afirmado en junio y que provocó un revuelo.
"Mire, lo es. Es un dictador en el sentido de que es un tipo que dirige un país que es comunista y se basa en una forma de gobierno totalmente diferente a la nuestra", contestó Biden.
Respeto mutuo
China respondió el miércoles tildando de "absurdos e irresponsables" a los comentarios, además de considerarlos "una provocación política abierta", en una disputa inesperada.
Destacando la fuerte insatisfacción de China, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning, puntualizó que los comentarios de Biden habían violado gravemente los hechos, el protocolo diplomático y la dignidad política de China.
El presidente chino, Xi Jinping, había asegurado, antes de las nuevas declaraciones de Biden refiriéndose a él como "dictador", que que "así como el respeto mutuo es un código básico de conducta para los individuos, es fundamental para las relaciones entre China y los Estados Unidos".
"Estados Unidos es único en su historia, cultura y posición geográfica, que han dado forma a su camino de desarrollo y sistema social distintos. Respetamos totalmente todo esto", expresó Xi en la cena de bienvenida ofrecida por organizaciones amigas en la nación norteamericana.
Y en ese ámbito se explayó ante su auditorio: "El camino del socialismo con peculiaridades chinas fue sido fundado bajo la orientación de la teoría del socialismo científico y está arraigado en la tradición de la civilización china con una historia ininterrumpida de más de 5.000 años".
Según la agencia de noticias Xinhua, Xi comentó: "Estamos orgullosos de nuestra opción, tanto como ustedes de la suya. Nuestros caminos son diferentes, pero ambos son la opción de nuestros pueblos, y ambos se dirigen a la realización de los valores comunes de la humanidad. Ambos deben ser respetados".
¿Qué había pasado en junio?
En junio, una declaración similar de Biden sonó feo en Pekín, desde donde respondieron que se trata de "una provocación política abierta" y el hecho repercutió incluso en Moscú.
China respondió tildando de "absurdos e irresponsables" a los comentarios, además de considerarlos "una provocación política abierta", en una disputa inesperada.
Destacando la fuerte insatisfacción de China, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning, puntualizó que los comentarios de Biden habían violado gravemente los hechos, el protocolo diplomático y la dignidad política de China.
Entonces, el punto de conflicto había sido un globo chino que sobrevoló el cielo de los Estados Unidos y fue derribado por este país.
"La `bocota` de Biden es un cañón suelto", reflexionó luego Wu Xinbo, director del Centro de Estudios Estadounidenses de la Universidad de Fudan en Shanghái.
"La confianza mutua es lo que China ha estado enfatizando, por lo que los comentarios de Biden son muy destructivos y dañinos", comentó
Wu, y agregó que los comentarios pueden no deshacer por completo lo que Blinken logró en su visita a China.