Una mujer andaba en bicicleta en Temperley cuando fue sorprendida por motochorros que la tiraron al piso para robarle el celular. Ella alcanzó a revolearlo hacia el parque de una casa y comenzó gritar desesperada. Al escapar, los delincuentes la arrastraron durante tres cuadras.
El dramático episodio, que quedó filmado en una cámara de seguridad, ocurrió este sábado cerca de las 23:30, cuando dos hombres en moto interceptaron a la víctima entre las calles Anchorena y Tejedor.
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La joven, que vive a una cuadra y media del lugar del ataque, se dirigía a la casa de su mejor amiga, ubicada a pocos metros. En ese momento se cruzó con ladrones.
El conductor le tocó la rueda trasera de la bicicleta con la moto y provocó su caída. Ella se levantó rápidamente, se acercó a una casa con rejas y tiró el celular hacia el patio interno.
Lejos de escapar, uno de los delincuentes trepó las rejas e ingresó a la propiedad para agarrar el teléfono. “Ayuda, ayuda”, gritó a la mujer desesperada y se colgó del ladrón que había ingresado. Sin embargo, el otro motochorro la tomó desde atrás y la tiró al piso.
En el momento de la fuga, la víctima se levantó rápido y se abalanzó sobre la motocicleta que ya estaba en marcha. Sin piedad, la arrastraron durante tres cuadras.
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De acuerdo a lo que se puede ver en la filmación, apareció la pareja de ella y comenzó a correrlos. “Soltala, la pu** que te parió, forro”, les gritó.
La mujer sufrió lesiones, pero se encuentra en buen estado. “Los vecinos que la vieron dijeron que rebotaba en el asfalto, parecía una bolsa. Quedó enganchada con las manos en la parte de atrás de la moto”, relató Ariel, la pareja de la mejor amiga de la víctima, en diálogo con TN.
También contó que la mujer se había comprado hace poco el celular. “Se dedica a hacer uñas y estuvo ahorrando durante un montón de tiempo para poder sacar fotos para su trabajo. En cinco minutos se lo sacaron”, señaló.
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Por su parte, otro vecino dijo que llegó a hablar con el novio de la víctima: “Me dijo que se la llevaron arrastrando de los pelos por tres cuadras. Cuando ella volvió caminando, se sentó en el cordón hasta que vino la ambulancia. Estaba golpeada”.
En cuanto al dramático momento del robo, contó: “Le dije a mi esposa que baje el televisor porque estaba escuchando gritos. Me acerqué a la ventana y se activó la alarma de mi casa. Es lo que estamos viviendo, es constante. Está difícil. A mi me tocó varios episodios, por suerte estamos en pie. Hay que estar atento a todo”.
