Jassmail Singh, un reconocido comerciante de nacionalidad india, fue atacado de manera brutal por tres sujetos que le exigían que le vendiera bebidas alcohólicas.
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Jassmail Singh, un reconocido comerciante de nacionalidad india, fue atacado de manera brutal por tres sujetos que le exigían que le vendiera bebidas alcohólicas.
Mientras desempeñaba su labor en el supermercado que está ubicado a pocas cuadras del casco céntrico de la Ciudad Termal, tres sujetos le exigían bebidas alcohólicas y la negativa del comerciante irritó a los hombres y entre los tres no dudaron en golpear al hombre y a romper lo que encontraban alrededor.
Vale señalar que el comerciante, quien ya radicó la denuncia policial, no quiso venderles las bebidas justamente porque en otras ocasiones los mismos sujetos ya le habían robado en el local.
"El domingo por la noche llegaron tres hombres, quienes, en reiteradas oportunidades, solían frecuentar mi negocio y junto a otros chicos de cómplices se llevaban productos y mercadería sin pagar", manifestó Jassmail Singh a El Tribuno.
Recalcó que "esos robos ya se habían dado muchas veces, porque incluso mis empleados lo habían corroborado a través de las cámaras y me contaron que más de una vez se iban y no querían pagar".
Puntualmente, sobre el lamentable hecho, el comerciante contó: "Cuando vinieron, nosotros no le quisimos vender cerveza, porque ellos, además de robar, siempre buscan problemas".
"Entonces les dije que no les iba a vender la bebida porque no me habían pagado en otras ocasiones, pero cuando les dije eso ellos se negaron y me dijeron que no era verdad lo que yo decía y a partir de ahí me empezaron a dar cachetadas y obviamente me enojé y tuve que reaccionar", relató.
La paliza duró varios minutos y los tres empleados que estaban allí no reaccionaron. Al respecto, señaló que "cuando me empezaron a agredir había tres empleados, pero les dio miedo, se escondieron atrás del mostrador y no me pudieron defender. Nunca imaginé ni pensé que me podía pasar algo así y mucho menos en un local que está cerca del centro y al que acuden gente muy buena y tranquila", se sinceró.
Por otro lado, Singh realizó la denuncia pertinente y aportó como evidencia el impactante video, donde se ve claramente a los sujetos y la agresión.
En ese sentido, afirmó un tanto molesto: "Ya hice la denuncia en la Fiscalía de Rosario de la Frontera y llevé las pruebas, pero todavía siguen libres, ya que la policía, no entiendo por qué, no los detuvo", y agregó: "Pensé en cerrar el local y volverme a mi país para no sufrir de nuevo otra situación así, pero no puedo irme, ya que tengo a mi señora embarazada y estoy a punto de ser papá, de lo contrario, no lo pensaba y me iba, pero no es tan fácil porque también tengo empleados a cargo y sería muy triste que quedaran sin trabajo".