El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, el republicano Kevin McCarthy, fue destituido este martes de su cargo por legisladores de su propio partido furiosos por haber ayudado a los demócratas en el recinto.
Por primera vez en sus 234 años de historia, la Cámara resolvió “dejar vacante el cargo de presidente” por 216 votos a favor y 210 en contra y preparó así el terreno para una inédita contienda para sustituir a McCarthy un año antes de las elecciones.
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La votación de 216 legisladores a favor y 210 en contra, forzada por un contingente de conservadores de extrema derecha, sumió en el caos a la Cámara de Representantes y a su liderazgo republicano.
El principal rival de McCarthy, el congresista Matt Gaetz, presentó la moción de destitución con el apoyo de poco más de un puñado de republicanos conservadores críticos de McCarthy y de muchos demócratas que dicen que no es digno de liderar la cámara.
El representante Patrick McHenry, de Carolina del Norte, fue nombrado presidente pro tempore de la cámara baja.
Por qué el ala dura del Partido Republicano forzó la destitución del presidente de la Cámara de Representantes
Gaetz es una figura destacada dentro del House Freedom Caucus, un pequeño grupo de legisladores republicanos de línea dura que llevó al gobierno al borde del abismo con su negativa a aprobar nuevos fondos federales sin recortes profundos del gasto.
El sábado pasado, el Congreso estadounidense aprobó una ley que amplía la financiación para asuntos clave durante 45 días, pese a las reticencias del ala dura de la oposición.

El grupo conservador se enfureció cuando McCarthy llegó a un acuerdo de emergencia con los demócratas. Lo acusó de pactar un acuerdo para evitar el cierre del gobierno estadounidense.
Gaetz anunció entonces que buscaría la destitución del líder republicano en la Cámara de Representantes, donde la oposición tiene mayoría simple.
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La iniciativa fue parte de una tensión que vive el Partido Republicano entre el ala dura que responde al expresidente Donald Trump, a la que pertenece Gaetz, y los conservadores tradicionales.
Tanto para que la moción fuera debatida como para que luego McCarthy fuera destituido, a los votos de más de 200 demócratas se sumaron los de poco más de una decena de republicanos-