A poco más de un año del cruento crimen de Guillermo Quiroga ocurrido en el microcentro de la capital provincial, su victimario Orlando César Herrera fue condenado ayer a la pena de 20 años de prisión. Herrera fue juzgado y hallado autor material y responsable del delito de "homicidio simple", por un hecho ocurrido el pasado 4 de agosto del año 2022.
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A poco más de un año del cruento crimen de Guillermo Quiroga ocurrido en el microcentro de la capital provincial, su victimario Orlando César Herrera fue condenado ayer a la pena de 20 años de prisión. Herrera fue juzgado y hallado autor material y responsable del delito de "homicidio simple", por un hecho ocurrido el pasado 4 de agosto del año 2022.
El juicio se desarrolló en la Sala de Audiencias de la Oficina de Gestión Judicial a cargo del Tribunal integrado por los jueces con función de juicio Mario Ramón Puig, presidente de trámite, Elio Luciano Yapura y Ana Carolina Pérez Rojas.
Pese al conformismo que el fiscal a cargo Diego Cussel expresó una vez conocido el veredicto por la cantidad de años con que fue sentenciado Herrera, los padres del joven asesinado manifestaron que junto a sus letrados van a intentar apelar el fallo, ya que consideran que "no hubo justicia" para su hijo y que además "no creen para nada en el pedido de perdón" del ahora condenado.
Según se pudo establecer en las audiencias que se desarrollaron en el Palacio de Tribunales, alrededor de las 23 del día 4 de agosto del año 2020, Guillermo Quiroga se encontraba caminando por avenida Senador Pérez entre las calles Belgrano y San Martín del microcentro capitalino, en inmediaciones de la entrada al gimnasio de la Sociedad Española.
Fue allí cuando Orlando Herrera sorprendió a su víctima, con quien mantuvo una discusión y posteriormente le asestó ocho puñaladas, provocando la muerte de Guillermo Quiroga. Luego del crimen, Herrera escapó por avenida Senador Pérez con dirección al barrio Belgrano.
"Nada subsana el dolor"
En las afueras del Palacio de Tribunales y junto a los "Padres y familiares del dolor" que llegaron para acompañarlos, Humberto Quiroga y Delia Tolaba, padres de "Guille" Quiroga, expresaron sentir "impotencia. Sentimos que mi hijo no tuvo la justicia que merecía por como le quitaron la vida y cuando él clamaba por su vida. Siempre le voy a decir que mi hijo amaba la vida y entonces yo creo que lo más indigno es lo que pasó de matar a una persona aún cuando esté clamando por su vida. Esto es lo más indigno, por eso es que nosotros vamos a seguir clamando justicia por él".
"Nadie paró al asesino y él no paró. Entonces ahora él está clamando justicia", aseguró Humberto, quien hizo hincapié en los dichos durante el juicio en que "no fue una riña como decían. Fue un ataque a traición y certero porque hubo persecución, hubo seguimiento, planificación, hubo cautela. Lo siguió por 15 cuadras".
Finalmente, expresaron que su hijo "murió inocentemente y lo más desgarrador es ver la filmación de la cámara. Ver cómo alegremente mi hijo su último día iba camino a su muerte. Por eso no le creo que esté arrepentido de lo que hizo este asesino. Porque lo vi en la sala cómo se reía y uno no se ríe enfrente de los padres de la persona que mató".
