Tras la denuncia de un vecino, el personal policial de la Dirección Prevención Ecológica y Sustancias Peligrosas de Junín capturó un mono carayá de una vivienda familiar. No obstante, tras el fallo de la Justicia a favor de María José Malizia, regresó a su casa. Mirá el emotivo reencuentro.
El animal convivió con ellos durante 24 años, no obstante, tras labrar un acta por violación a la Ley de Fauna, fue trasladado a la reserva Temaikén de Escobar. Su familia no se conformó con ello y comenzó a juntar firmas para que volviera con ellos.
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Laiza se deprimió durante los días que estuvo en Temaikén y no se alimentaba. Su familia contrató un abogado para que los ayudara a solicitar la restitución del animal. En este contexto, una jueza falló a favor de ese pedido y decidió la inmediata devolución del animal a la familia.
En sus redes sociales, María José Malizia compartió el emotivo reencuentro y expresó: “Acá esta Laiza con nosotros. Gracias, gracias, gracias a toda la gente que hizo fuerza por Laiza”.
A través de una entrevista brindada a Canal 13 explicó que hace 24 años, durante la deforestación del Chaco, murieron muchos animales, entre ellos, la madre de Laiza, por lo que ella y su esposo decidieron adoptarla.
La mona creció como una más de la familia. Jugaba libremente en el patio y se paseaba por las casas de los vecinos. Esta es la razón por la que el animal se deprimió durante el tiempo que estuvo en la reserva. “Cuando a mí me sacaron a Laiza, estuvo cuatro días sin comer en Temaikén. ¿Cómo puede ser que en mi casa no la pueda tener, que esté libre en el patio, y tenga que pagar una entrada de $7.000 para que ella se pueda ver en una jaula? Eso es lo que más bronca me daba” expresó.
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