¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

Su sesión ha expirado

Iniciar sesión
14°
30 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

La historia del nacimiento de la Sede Orán de la UNSa, contada en un libro

Augusto E. Rufino escribió "Historia de la creación de la Sede Regional Orán...". El trabajo será presentado el lunes 28, a las 21, en la casa de altos estudios de la ciudad norteña, Alvarado 750. 
Martes, 22 de agosto de 2023 12:21
La historia del nacimiento de la Sede Orán de la UNSa, contada en un libro La historia del nacimiento de la Sede Orán de la UNSa, contada en un libro

En el marco de los 50 años de vida de la Sede Orán de la UNSa -ahora Facultad Regional- se presenta el libro "Historia de la creación de la Sede Regional Orán de la Universidad Nacional de Salta", de Augusto Enrique Rufino; será en la casa de altos estudios de la ciudad norteña, Alvarado 750, el lunes 28, a las 21. El Coro Polifónico de la Universidad, dirigido por Kelly Wayar, participará del momento. 

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

En el marco de los 50 años de vida de la Sede Orán de la UNSa -ahora Facultad Regional- se presenta el libro "Historia de la creación de la Sede Regional Orán de la Universidad Nacional de Salta", de Augusto Enrique Rufino; será en la casa de altos estudios de la ciudad norteña, Alvarado 750, el lunes 28, a las 21. El Coro Polifónico de la Universidad, dirigido por Kelly Wayar, participará del momento. 

El prólogo corresponde a la licenciada María Delia Rufino, la digitalización de la documentación estuvo a cargo de Enrique Donat Luna, jefe de Prensa de la Facultad. La edición es de Juana Manuela Editorial.

El encuentro también se enmarca en las festividades por un nuevo aniversario de la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán. Será todo un momento para compartir "una historia que merece ser contada", como dice el autor del libro.

La historia del nacimiento de la Sede Orán de la UNSa, contada en un libro La historia del nacimiento de la Sede Orán de la UNSa, contada en un libro

El nacimiento

Augusto Enrique Rufino estuvo en la comisión pro-universidad. El escritor y poeta oranense, de destacada trayectoria nacional e internacional y que escribe la historia de la sede, entonces cursaba el tercer año del secundario. El Tribuno dialogó con él sobre esa experiencia colectiva que significó la concreción de un anhelo de muchos, y que revive en el libro.

"En la casa donde vivíamos coincidentemente funcionó por primera vez la Escuela Municipal que después se convierte en la escuela General Pizarro, la primera de Orán y después de muchos años -porque eso fue a fines del siglo XIX, principios del siglo XX, se traslada a otro domicilio y después a un edificio propio, y casi 50 años después en el mismo lugar nos reunimos estudiantes por iniciativa de mi padre, Augusto Rufino Navamuel", cuenta el escritor, y agrega: "Era agrimensor, director de la escuela nocturna de Comercio y veía que había muchos alumnos muy inteligentes y realmente capaces y no tenían posibilidades de estudiar afuera y tampoco podían estudiar en Orán, porque no había una oferta terciaria ni universitaria y tampoco existía la Universidad Nacional de Salta". Los que tenían recursos para estudiar debían viajar a Tucumán, a la universidad pública, o a Salta, a la Universidad Católica. Córdoba y Buenos Aires también eran destinos obligados.  

La noticia

Rufino es muy preciso en su relato, suma nombres y datos. Su oficio de escritor le brinda la posibilidad de ser claro e ir hilando una historia que involucra a toda la región. "Y justo el diario El Tribuno publica en su editorial la noticia de la creación de la Universidad Nacional de Salta, un viejo anhelo de los salteños, y que se designaba a Germán Ovejero Solá como coordinador, organizador", continúa el escritor. Y desde lo cotidiano, recuerda: "Estábamos desayunando con mi padre, yo me iba a la escuela, estaba en tercer año, y me acuerdo que me dice: 'Augusto, se creó la Universidad Nacional de Salta y vamos a tratar de tener una sede como ocurre en Buenos Aires'. La UBA estaba descentralizada y tenía sedes en el interior, y también ocurría en la Universidad  Nacional del Comahue, y él conocía gente del Comahue que le comentaba que había sedes regionales".

 Silvia Lara Gros, Susana Barcat, Teresa Valdiviezo, José Félix Castellanos, Alberto Rufino y Jorge Durgam.

"Entonces, mi padre me dice 'voy a viajar a Salta, a verlo a Néstor Oscar Palacios', que era oranense. Su padre había trabajado en el Ingenio el Tabacal, y una de las avenidas principales de Orán lleva su nombre -Rodolfo Palacios- y lo acompañé, y fuimos a verlo a Palacios, que era secretario de Cultura del gobierno de Ricardo Spangenberg. Era 1972 y el presidente era Agustín Lanusse", detalla.  Palacios los apoya, Rufino cuenta: "Y nos dijo es importante que muevan a las fuerzas viva y vos, con tus compañeros y estudiantes, me dice a mí, reúnanse y hagan una comisión".

La comisión

Y deciden con otros estudiantes y su padre convocar a los vecinos. "Mucha gente grande incluso no creía, era como alejado el tema universitario; incluso profesionales decían: 'No, en Orán no creo por la cantidad de gente'. Pero mi viejo perseveraba y estaba convencido, y nos reunimos un 19 de julio de 1972 como a las 20 horas, en la Pellegrini 355, mi casa. Por eso tengo toda la documentación y pude escribir el libro", recuerda. Y cierra: "Coincidió con que estaba en Orán el periodista de El Tribuno César Fermín Perdiguero; uno de los chicos que era hijo de los dueños de la LW4 Radio Orán lo comenta y lo encontramos y se viene a la casa con Salomón, que era el corresponsal. E hicimos la reunión y el acta con los delegados de los colegios que había".

Perdiguero fue publicando las entrevistas que les fue haciendo y el tema empezó a tener repercusión. "En el libro lo menciono y digo que fue vital El Tribuno de Salta y después lo designamos a Perdiguero delegado de la comisión en Salta, junto con el maestro Roberto Terrones Riera, que era un historiador de Orán y vivía en Salta", informa Rufino. 

Comunidad regional

Se suman personas mayores, profesionales, docentes, gracias al trabajo de la comisión. "Hicimos la campaña enviando notas al intendente, al jefe de la Policía, al comandante de Gendarmería, a instituciones privadas como al presidente del Club Argentino, de la Sirio, a la Liga de Madres y Amas de Casa, al Obispado, inclusive al Centro de Taxistas, a la CGT, a todo el mundo comentándoles que se había formado la comisión para pedir una sede de la universidad en Orán", enumera.

"Fuimos a Hipólito Yrigoyen, a Santa Rosa, a Pichanal... también a Embarcación, en el departamento San Martín, para lograr que los intendentes nos manifiesten su apoyo. Y se iba sumando la gente que pedía la universidad. Tuvimos mucho éxito y fue creciendo hasta que tuvimos eco en las autoridades nacionales", recuerda Rufino.

Factibilidad

"El coordinador Ovejero viajó a Orán y se entrevistó con mi padre, nuestro principal asesor. Hicimos una asamblea en el Colegio del Huerto para comunicar a la comunidad los avances y también para sumar a personas mayores, porque estábamos entrando a una etapa en la que teníamos que hacer estudios de factibilidad para fundamentar que Orán podía tener una casa de altos estudios por la cantidad de alumnos", dice el escritor.

"En esa época estaban la escuela nocturna de Comercio, el Colegio Nacional que era anexo Bachillerato que después se separó, estaba el Colegio de Nuestra Señora del Huerto, estaba el Colegio San Antonio de Padua, la Escuela Nacional de Educación Técnica... eran seis o siete secundarios", dice, y continúa el relato: "Y mandan de Nación a un licenciado de apellido Maletta, para hacer un estudio de factibilidad... y no solo nos pedían datos de los alumnos sino también las riquezas de la zona, las principales actividades económicas. Y este era un lugar agrícola sobre todo, también estaba la empresa azucarera Ingenio Tabacal y nos ayudaron Severo Cáceres Cano y también el profesor Hugo Alberto Luna, ahora uno de los colegios lleva su nombre. Ellos trabajaron con nosotros para elevar ese informe a la gente que hizo el estudio de factibilidad".

Cuando la fundamentación se presento, el ministro de Educación y Cultura de la Nación, Gustavo Malek, fue a Orán. Rufino lo recuerda así: "Gracias a El Tribuno, la noticia salió también en el Pregón de Jujuy, en la Gaceta de Tucumán, e inclusive en algunos medios de Buenos Aires... Se habló de un movimiento de estudiantes del interior de Salta que pedía la universidad".

El ministro Malek se compromete a que se iba a descentralizar el funcionamiento de la Universidad Nacional de Salta, que se estaba organizando para comenzar sus actividades en el 73. "Nosotros transmitíamos el deseo de que Orán contara con una casa de altos estudios por la imposibildad de muchísima gente de continuar sus estudios. Eso únicamente lo podían hacer las personas que tenían una situación económica diferente", concluye esta parte del relato. 

Tartagal

La iniciativa oranense se torna un ejemplo y aliciente para otras ciudades importantes. "Cuando se entera la gente de Tartagal, se forma un grupo de estudiantes allá y se vienen a Orán a consultarnos y a sumarse. Y comienza una lucha juntos entre Tartagal y Orán, y se logra afortunadamente que en la creación de la universidad se contemple las sedes regionales. Se crea la sede de Orán, la de Tartagal y también una tercera sede para Metán y Rosario de la Frontera, pero no llega a funcionar porque a muchos estudiantes les quedaba cerca Tucumán".

El escritor oranense recupera esta historia con muchos nombres y situaciones que pintan tiempos y regiones de la provincia. "Queremos a través de este libro que la comunidad conozca esta institución desde sus primeros pasos y, sobre todo, a quienes desde la tarea de la comisión logran forjar este importante hecho. Porque fue importantísimo para Orán tener una casa de altos estudios", dice.

 

  La comisión de 1972, a la izquierda, Augusto Rufino Navamuel; al centro, César Fermín Perdiguero.

"La herramienta más valiosa de la vida"

"Pretendemos dejar testimonio a través de un texto cronológico y fundamentado en documentación: recortes de diarios, actas, resoluciones", describe Rufino. El prólogo fue escrito por María Delia Rufino, hermana del escritor y quien fuera presidenta de la comisión pro-facultad. El escritor oranense suma muchos nombres en la charla, que el lector encontrará en el libro. "Arrancamos con Licenciatura de Antropología Social, Enfermería Universitaria Profesional, Ingeniería Agronómica Forestal, Letras... y en la actualidad tiene 10 carreras", dice. "Viene muchísima gente de localidades vecinas y hasta de Bolivia y es una muy buena posibilidad de que las personas de la región estudien en su región", cierra.

El conocimiento

"Mi viejo era una persona de bajo perfil y hacía mucho por sus alumnos", dice sobre Augusto Rufino Navamuel, y cuenta: "Como agrimensor muchas veces lo acompañé cuando vecinos necesitaban hacer subdivisiones. Íbamos con el teodolito a tomar las medidas y él entregaba el croquis, explicaba cómo tenían que hacer para que no haya diferencias. Y me acuerdo que un día le pregunto: 'Papá ¿no les cobras?'. Y me dice: 'No, hijo, es gente que no tiene recursos económicos y no le podés cobrar".

"Siempre hizo cosas por los demás. Y a nosotros nos hacía valorar el poder del conocimiento como la herramienta más valiosa de la vida. Él decía que en la vida hay que dejar una huella, hay que hacer algo por los demás", recuerda con emoción Augusto Rufino a su padre.

 

Temas de la nota

PUBLICIDAD